Estoy en la semana 31, y el bebe empieza a engordar a pasos de gigante, tal y como hizo su hermano mayor. De repente es 2 semanas mas grande de lo que le corresponde, ya pesa 2kg, y si va engordando 200gr por semana, nos ponemos en los 4kg con 40 semanas. Igual que su hermano, gramo arriba, gramo abajo.
La semana pasada me dio un bajón considerable. Al no dar a luz en el mismo hospital que con el peque mayor, sino en uno privado, por temas que ahora no vienen al caso, me entraron miedos y mas miedos. Ya sabemos que en los seguros privados les encanta hacer cesareas, y mi ginecologo, a la pregunta de ¿y si es muy grande me provocarían el parto? (cosa que creo que también pregunté con el peque mayor), me contestó, hombre si vamos viendo que pesa en torno a 4 kilos sí. En el hospital donde di a luz al peque mayor, ante esa pregunta, me contestaron, "no te preocupes, hay mujeres mas pequeñas y estrechas de cadera de que tu, y han dado a luz a niños de 5 kilos". Me daban confianza en mí misma...pero aquí...Después de pensarlo varios días, salvo que me den una razón de peso, que afecte a la salud del bebe o a la mía, no van a provocarme el parto. No lo voy a consentir. La semana pasada me hicieron una eco de control porque tengo mas liquido amniótico de lo normal (ya decía yo que esta barriga no era muy normal...) y finalmente es sin motivo justificado, lo más seguro que se haya hecho sitio porque el niño va a ser grande. De todas formas me harán mas controles, porque se está empezando a borrar el cuello del utero, y al tener la bolsa mas grande se puede provocar antes el parto... Todas estas cosas están haciendo que mi ansiedad aumente y tenga cada vez mas ganas de dar a luz, necesito saber que el bebe está bien, y que todo va a salir bien... Pero aún quedan dos meses...