Rommel con varios oficiales en El Agheila. Fotografía obtenida en el día de hoy.
Camaradas,
Los enemigos de Rommel en el Norte de África no pueden estar más equivocados. En el día de hoy, Auchinleck le ha escrito a Churchill diciéndole que las fuerzas del Eje “se encuentran muy desorganizadas y carecen tanto de oficiales experimentados como de material. No parecen tan fuertes en la realidad como se pudiera deducir a partir de sus números. Estoy convencido de que el enemigo está bajo una presión mucho mayor de la que podamos imaginarnos siquiera.” Entre otros comentarios, Auchinleck ha tenido la torpeza de afirmar que la situación de suministros de Rommel es “obviamente grave” y que “tenemos a Rommel en el bote.”
El General Schmitt, poco después de su captura en Bardia el 2 de enero de 1942.
Estas erróneas conclusiones del Alto Mando Británico proceden tanto de su desconocimiento de que Rommel recibió la semana pasada un considerable refuerzo de más de medio centenar de tanques, una veintena de vehículos blindados, varios cañones e ingentes cantidades de munición y combustible, como de la información obtenida por su Servicio de Inteligencia. El MI6 ha inducido una falsa sensación de seguridad a dos de los oficiales alemanes de mayor graduación que se encuentran en manos británicas: el General Artur Schmitt, comandante de la guarnición de Bardia y al Generalmajor Johann von Ravenstein, antiguo comandante de la 21ª División Panzer.
El General von Ravenstein fotografiado en Tobruk poco después de su captura. Ha sido el primer General alemán capturado en la guerra.
Los dos generales alemanes han sido colocados en habitaciones repletas de micrófonos y sus largas conversaciones han sido grabadas por los británicos. Ha sido von Ravenstein, capturado el 29 de noviembre de 1941, quien ha atraído el mayor interés británico. El ex comandante de la 21ª División Panzer ha revelado que los regimientos Panzer del Panzergruppe han sufrido pérdidas devastadoras. Von Ravenstein también ha señalado la falta de oficiales experimentados de que adolece el Panzergruppe y su insatisfacción con el mando de Rommel. En lo concerniente a esto último, tanto el General Schmitt como el General von Ravenstein coinciden. Auchinleck ha recogido esta tranquilizadora visión del Panzergruppe y la ha incluido en la comunicación que ha enviado hoy a Churchill, a pesar de que von Ravenstein y Schmitt han permanecido lejos del cuerpo principal del Panzergruppe durante un tiempo y no tienen manera de saber la situación actual. Imprudentemente, Auchinleck cree que se pueden extraer “imágenes muy exactas e interesantes” de estas conversaciones de prisión y así se lo ha expresado a Churchill.
Un soldado británico posa ufano, seguro de la victoria.
Por desgracia para Auchinleck, el Servicio de Inteligencia de Rommel ha obtenido sus propias “imágenes exactas e interesantes.” Para la jornada de hoy, 12 de enero, el Comandante Friedrich Wilhelm von Mellenthin ha logrado reunir suficientes datos como para informarle a Rommel acerca de las posiciones del XIII Cuerpo Británico. Von Mellenthin le ha dicho a su Comandante en Jefe que el relevo de la 7ª División Acorazada por la 1ª División Acorazada ofrece “la oportunidad de asestar un contraataque efectivo. Sin embargo, el planeado contraataque tendrá que ser lanzado antes del 25 de enero. Para entonces, ha sostenido von Mellenthin, “el equilibrio habrá quedado restablecido e incluso se habrá inclinado a favor de los británicos.”
Rommel retratado con sus ayudantes.
Al principio con ciertas aprensiones respecto a la situación de sus propios suministros, Rommel en cualquier caso no ha tardado en inclinarse a favor de la idea de un ataque fulgurante y por sorpresa una vez ha quedado convencido de la debilidad de las posiciones de vanguardia del Octavo Ejército Británico. El Teniente Coronel Siegfried Westphal ha desempeñado un papel significativo en el cambio de idea de Rommel. Westphal ha efectuado un vuelo de reconocimiento a baja altitud sobre territorio enemigo y ha podido mitigar los temores de su Comandante en Jefe con una comprobación de primera mano de la precariedad de las líneas británicas. Los enemigos del Eje, aparentemente, no han aprendido nada y, al igual que hicieran el año pasado tras conseguir expulsar a los italianos de Cirenaica durante el transcurso de la Operación Compass, han vuelto a cantar victoria antes de lo debido. Erwin Rommel les enseñará el amargo sabor de la derrota una vez más, y en esta ocasión… ¡no se detendrá hasta Alejandría!
Es lebe Erwin Rommel!Die Panzer rollen in Afrika!