Autoridades de salud informaron el martes que 239.000 de los originales 300.000 siguen todavía recibiendo avisos finales.
Más de 300.000 inmigrantes en Estados Unidos podrían perder el seguro de salud que ofrece el gobierno si no demuestran esta semana que tienen permiso legal para estar en el país, pero barreras como el idioma y fallas informáticas están afectando los esfuerzos para alertarlos.
Muchos de estos inmigrantes se afiliaron al seguro médico gracias a la Ley de Protección al Paciente y Cuidado de Salud Asequible, conocida también como Obamacare porque fue promovida por el presidente Barack Obama.
El gobierno envió cartas en inglés y español el mes pasado para notificar a las personas que si los documentos de migración y ciudadanía no son entregados para el 5 de septiembre, el día 30 quedará cancelada su póliza.
Sin embargo, pocos han respondido. Autoridades de salud informaron el martes que 239.000 de los originales 300.000 siguen todavía recibiendo avisos finales.
Defensores de los migrantes dicen que muchos no están respondiendo a los avisos del gobierno por la barrera del idioma, ya que se enviaron sólo en inglés y español y no tomaron en cuenta la variedad de lenguas.
También dicen que aquellos que recibieron las cartas ya habían presentado los documentos ya sea por correo postal o vía electrónica, pero la documentación se perdió o no fue procesada. Y temen que aquellos que no han respondido no entienden la gravedad de la situación o piensan que ya cumplieron.Una línea al final de la carta aconseja llamar a un número si necesitan que les traduzcan el aviso, dice Amy Jones, de Southeast Asian Mutual Assistance Associations Coalition Inc.
"La gente no sabe lo que dicen los avisos o que no es importante. Muchos los han tirado", agrega Jones, cuya agencia ayudó a 450 migrantes a inscribirse al seguro médico con la nueva ley.
De los ocho millones de personas que se inscribieron para tener servicios privados a través de la ley de seguro de salud, casi un millón de migrantes recibieron cartas donde se les pidió que demostraran que tenían permiso para residir en el país y unos 700.000 han sido verificados.
Bajo esta ley, aquellos que no tengan residencia legal para vivir en el país no son elegibles al programa de salud ni para recibir subsidios.
Florida y Texas tienen el mayor número de inmigrantes cuya información migratoria y de ciudadanía se contradice con lo que escribieron en sus documentos al inscribirse al seguro.
Casi 100.000 en Florida recibieron cartas de los federales, sin embargo dos importantes grupos de ayuda han recibido pocas llamadas pidiendo su asistencia.
Muchos usuarios dicen que siguen recibiendo solicitudes para entregar documentos aunque ya los han enviado varias veces. Sin embargo, las autoridades están retrasadas procesando los papeles.Además, aquellos que suben los documentos por computadora a www.healthcare.gov deben llamar para ver si fueron recibidos.