Vicente: A nosotros, que hemos nacido poetas entre todos los hombres, nos ha hecho poetas la vida junto a todos los hombres. Nosotros venimos brotando del manantial de las guitarras acogidas por el pueblo, y cada poeta que muere deja en manos de otro, como una herencia, un instrumento que viene rodando desde la eternidad de la nada a nuestro corazón esparcido. Ante la sombra de dos poetas nos levantamos otros dos, y ante la nuestra se levantarán otros dos mañana. Nuestro cimiento será siempre el mismo: la tierra. Nuestro destino es parar en las manos del pueblo. Sólo esas honradas manos pueden contener lo que la sangre honrada del poeta derrama vibrante. Aquel que se atreve a manchar esas manos, aquellos que se atreven a deshonrar esa sangre, son los traidores asesinos del pueblo y la poesía, y nadie los lavará: en su misma suciedad quedarán cegados.Tu voz y la mía irrumpen del mismo venero. Lo que echo de menos en mi guitarra lo hallo en la tuya. Pablo Neruda y tú me habéis dado imborrables pruebas de poesía, y el pueblo, hacia el que tiendo todas mis raíces, alimenta y ensancha mis ansias y mis cuerdas con el soplo cálido de sus movimientos nobles.Los poetas somos viento del pueblo: nacemos para pasar soplados a través de sus poros y conducir sus ojos y sus sentimientos hacia las cumbres más hermosas. Hoy, este hoy de pasión, de vida, de muerte, nos empuja de un imponente modo a ti, a mí, a varios, hacia el pueblo. El pueblo espera a los poetas con la oreja y el alma tendidas al pie de cada siglo.
- Dedicatoria de Miguel Hernández a Vicente Aleixandre 'Viento del Pueblo' (1937)
El poeta oriolano. Foto: CVC
MIGUEL: LA VERDAD INSISTE EN EL VIENTO Manuel Villacieros Juliá
A Miguel Hernández, poete de Orihuela y España, en el centenario de su nacimiento. Alicante, a 30 de octubre de 2010
el hombre caminaba solo,silenciado en once ominosas celdas… y solo, lamió las llagas de la iniquidad. te hablo a ti, Miguel porque estás vivo…eres mucho más que un cuerpo sin alma,desnudo en su tumba; no perteneciste a esos, no;no eres uno más de esos miles de olvidados que dejaron tras de sí aquellos que nunca pudieron vencer al viento.
fuiste nadador contracorriente
hoyando la infinitud de las olas de una mar herida y rugiente, oscura…heredera de una urdimbre de sombras tejida por el oscuro vencedor en la tierra.caminaste firme, nunca sometido al silencio…Miguel, tu voz imperecedera templada en campos y trincherasno se rindió al marasmo de mil vocesde aquellas gargantas agoreras, vencedoras, insultantes,que parecían relamerse mascullando memorias y olvidos, propios o ajenos…ociosas palabras de unos nadies, que, eternizándose en el aire, semejan retratos de caras sin ojos, que cuelgan de un gris nubarrón y son mecidas por un viento ácido, leve… impenetrable.caminaste en pos de esa verdad que ha vivido latente en cada espasmo de tu cuerpo enfermo…sentirse y vivir preso de una existencia sin luz, rayana a las lindes del odio…sentir en las entrañas el odio de un vencedor en la tierra, incapaz de derrotar al viento.sí,caminaste solo, Miguel, impasible, lúcido, vulnerable…viendo tu idea cien veces desmentida,mil veces injuriada…creciendo, jamás derrotada por el turbio vencedor en la tierra,ese extraño que nunca venciera a las palabras,las palabras que viven del viento… las mismas que vuelan airosas en tus ‘Vientos del Pueblo’.en tu hiriente fragilidad,viviste el lento desvanecer de tu humanidad,el inexorable disolver de tu propia imagen; y aún así, Miguel, hermano,en tu lucha sin flaquezas, supimos que más firme se erguiría, imponente,tu desencajada figura,mil veces lacerada…juramentos y pasiones perdidashabían silenciado tu boca, mas, los vientos durmieron, de la oscuridad nació una brisa sutil vestida de los perfumes de la noche…con su llegada,sentiste que la palabra escritatomaba el control de tu vida y que ya nada detendría la mano que escribe.‘Existen cosas secretas [dirían entonces las gentes…]aún tras la reja de una celda,para el poeta,la verdad insiste en el viento…’y el hombre,hermano,poeta, supo que sus versos estarían en la memoria de las gentes y que él era uno más de esos que no van por la vida pidiendo permiso.***Vientos del pueblo interpretado por LOS LOBOSVIENTOS DEL PUEBLO ME LLEVANMiguel Hernández (1937)
Vientos del pueblo me llevan,
vientos del pueblo me arrastran,
me esparcen el corazón
y me aventan la garganta.
Los bueyes doblan la frente,
impotentemente mansa,
delante de los castigos:
los leones la levantan
y al mismo tiempo castigan
con su clamorosa zarpa.
No soy un de pueblo de bueyes,
que soy de un pueblo que embargan
yacimientos de leones,
desfiladeros de águilas
y cordilleras de toros
con el orgullo en el asta.
Nunca medraron los bueyes
en los páramos de España.
¿Quién habló de echar un yugo
sobre el cuello de esta raza?
¿Quién ha puesto al huracán
jamás ni yugos ni trabas,
ni quién al rayo detuvo
prisionero en una jaula?
Asturianos de braveza,
vascos de piedra blindada,
valencianos de alegría
y castellanos de alma,
labrados como la tierra
y airosos como las alas;
andaluces de relámpagos,
nacidos entre guitarras
y forjados en los yunques
torrenciales de las lágrimas;
extremeños de centeno,
gallegos de lluvia y calma,
catalanes de firmeza,
aragoneses de casta,
murcianos de dinamita
frutalmente propagada,leoneses, navarros, dueños
del hambre, el sudor y el hacha,
reyes de la minería,
señores de la labranza,
hombres que entre las raíces,
como raíces gallardas,
vais de la vida a la muerte,
vais de la nada a la nada:
yugos os quieren poner
gentes de la hierba mala,
yugos que habéis de dejar
rotos sobre sus espaldas.Crepúsculo de los bueyesestá despuntando el alba.
Los bueyes mueren vestidos
de humildad y olor de cuadra;
las águilas, los leones
y los toros de arrogancia,
y detrás de ellos, el cielo
ni se enturbia ni se acaba.
La agonía de los bueyes
tiene pequeña la cara,
la del animal varón
toda la creación agranda.
Si me muero, que me muera
con la cabeza muy alta.
Muerto y veinte veces muerto,
la boca contra la grama,
tendré apretados los dientes
y decidida la barba.
Cantando espero a la muerte,
que hay ruiseñores que cantan
encima de los fusiles
y en medio de las batallas
Miguel Hernández dirigiéndose a soldados y brigadistas internacionales (elpais.com)
VIENTO DEL PUEBLOMiguel Hernández1937
PrólogoELEGÍA PRIMERA
SENTADO SOBRE LOS MUERTOS
VIENTOS DEL PUEBLO ME LLEVAN
EL NIÑO YUNTERO
LOS COBARDES
ELEGÍA SEGUNDA
NUESTRA JUVENTUD NO MUERE
LLAMO A LA JUVENTUD
RECOGED ESTA VOZ
ROSARIO, DINAMITERA
JORNALEROS
AL SOLDADO INTERNACIONAL CAÍDO EN ESPAÑA
ACEITUNEROS
VISIÓN DE SEVILLA
CENICIENTO MUSSOLINI
LAS MANOS
EL SUDOR
JURAMENTO DE LA ALEGRÍA
PRIMERO DE MAYO DE 1937
EL INCENDIO
CANCIÓN DEL ESPOSO SOLDADO
CAMPESINO DE ESPAÑA
PASIONARIA
EUZKADI
FUERZA DEL MANZANARES
VIENTO DEL PUEBLO
Miguel Hernández
Ediciones Cátedra S. A.
CLÁSICOS HISPÁNICOS Y UNIVERSALES, 2010
Foto: Luis Sevillano
MARCELINO CAMACHO
Sindicalista
Nació el 21 de enero de 1918 en Osma la Rasa (Soria)Falleció en Madrid el 29 de octubre de 2010
¡Hasta siempre!!