Estamos en el último día del año 2014, ha sido un año maravilloso en toda índole
y no quiero dejar que termine este año sin antes contarles algo que vino a cambiar en parte nuestra vida familiar.
¿Se acuerdan de Mila?...
Un día fue una guerrera.
Luchó por sobrevivir, y lo consiguió.
Cuando ya estaba recuperada completamente, como acostumbramos le dimos la oportunidad para que una familia linda la pudiera adoptar. Nos escribieron de varias partes de Chile, y también del exterior, pero necesitábamos que Mila se quedara en Santiago para tenerla cerca en caso que nos necesitara.
Nosotros fuimos absolutamente transparente cuando les contamos que Mila era muy especial, tenía que irse con una familia especial, queríamos una familia que se la jugara por ella al cien por ciento. De todas las personas que nos escribieron para adoptarla, encontramos una que elegimos por su manera de expresarse, de sentir, por lo dedicada que se mostró. La señora nos pidió que se la fuéramos a dejar un día viernes para dedicarle el mas tiempo posible junto a su esposo e hijita, una pequeñita terriblemente amorosa que desde que vió a Mila, se enamoró de ella. Así lo hicimos, la fuimos a entregar a sus adoptantes, quienes se portaron muy bien desde un comienzo comprometiéndose hasta el final con la cachorra que iban a recibir. Estábamos casi seguros que Mila sería feliz con ellos aunque a nosotros el corazón se nos partiera, pero teníamos que darle la oportunidad de pertenecer a una familia que la aceptara y la pudiera amar. Fue difícil volver a casa y tener que volver a vivir sin Mila, que ya no estaba en su lugar, no volvería a correr por toda la casa metiendo bulla, sus ladridos a todo pulmón se silenciaron. A mi casa algo le falaba. Pasó el viernes, pasó el sábado, cuando el domingo por la mañana, me llama la señora muy afligida, pidiéndome disculpas por que no podría quedarse con Mila, no se sentía capaz de darle todo lo que Mila había tenido en su corta vida desde que la rescátamos del abandono, de esa vida salvaje que le esperaba si hubiera sobrevivido en el cerro, si es que lo hubiera hecho. Me la devolvía con el dolor de su corazón, mas una camita, y el arnés que le habían comprado. Llevaron de vuelta a Mila a mi casa, los hice pasar, les presenté a cada uno de nuestros rescatados, lo felices que son en su hogar, que es tan fácil amarlos. Pero la señora se excusó de no ser capaz para darle a Mila lo que necesitaba, era una perra humanizada que nació en un cerro, donde su madre llevada por el instinto animal, reconoció que era un ser débil, que no servía y sencillamente la botó de la camada.
Cierta persona al escuchar que devolverían a Mila dijo: dicen que "cuando amas tanto algo hay que dejarlo ir, y si vuelve a ti es por que era tuyo". Mila es mía. La tomó en sus brazos, la besó y les dió las gracias a Dios y a la familia por habersela devuelto.
Así fue como Mila se quedó en nuestra casa, y pasó a ser la hermana de.
Es difícil recordar todo lo que podría contarles, son tantos los recuerdos que tengo en mi mento. Por lo menos lo intentaré.
Empezó a crecer, se fue convirtiendo poco a poco en lo que es hoy.
De pequeña quedaba dentro de casa, junto a nuestra Kitty, hasta que cierto día mi exclamación de horror fue grande, la encuentro tirando a Kitty de la oreja, como diciendo, yapo vamos a jugar, y la pobre Kitty apenas podía sostenerse, entonces pasó a ser Mila la terrible. Desde ese momento cada vez que tenia que salir la dejaba en el patio, cuando al volver me recibia el tremendo escándalo, su ternura era enorme, estiraba sus patitas delanteras en son de "abracitos", luego iba al patio encontrándome con todas las plantas hechas tiritas, con caritas como de yo no fui y se metía corriendo dentro de casa. Pobre de mi que se me quedara una ropa colgada, todo iba al suelo y si encontraba algún cable cerca suyo en un dos por tres, el cable estaba cortado en pedacitos. Así fue como pasó a llamarse Mila monstruito.
Asi que para poder dejar la ropa tendida teniendo que salir, me veía obligada a llevarla a donde yo iba, muchas veces es mi compañera para ir al camino, fue ahí cuando su madre la reconoció, fue increíble, ver a su mamá como se acercaba al auto y le ladraba con furia, como diciendo bajate de ahí.
Ah...y cuando yo llamo a Rengui, y si ésta no va de inmediato, Mila va a buscarla, se le para en frente con su cola herguida como diciendo, la mamá te está llamando a-ho-ra. Mila la pone orden.
Es normal que cuando Kitty despierta a la hora que sea, le da por caminar, como está cieguita y sorda, se mete por lugares mas escondidos, y es Mila la que está pendiente de ella, es la primera en encontrarla y se queda a su lado, cuando Kitty necesita ayuda para pararse y no nos hemos dado cuenta, es Mila quién nos avisa. Mila la detective.
Desde que la traje a mi hogar obligada por las circunstancias, siempre ha dormido dentro de casa, al comienzo en su camita, pero cuando empezó a crecer y pudo subirse a las camas, no se separa de la nuestra, es así que en pleno invierno se metía a dormir al lado de quién hoy es su papá.
Pero la vieran cuando duerme es un verdadero ángel. Nadie diría lo diablilla que fue.
Aprendió abrir las puertas, lo logra, y cuando quiere ir a ver a Ika sabe que esa puerta no se abre como ella sabe, así que se sienta a esperar para que lo hagan. Es de todos los días que hace zumbar a Ika, jugando, la pobre gorda queda atroz de cansada, es un deleite verlas.
Y cuando quiere que Rayo Boy le ponga atención, intenta besuquearlo, pero Rayito mamón se enoja.
Le encanta jugar, y para ello su hermana le ha comprado variados juguetes que duran el rato, pero hay uno que es el que mas le ha durado, le llama pollo, lo tira, lo trae, lo lleva, para todos lados y desde que aprendió a traer cosas, los envases de bebidas son su prioridad. Cuando ve salir que su hermana saca a pasear a Rayito, Ika y Catalina, y a ella no la llevan, afirmate por el escándalo que hace, verdadera pataleta, es aqui cuando es Mila la salvaje.
Mila obedece a las órdenes de sit, sientese, arrastre, media vuelta, arriba, abajo, a la cama, al auto, es increíble lo fácil que le ha resultado aprender de las clases que le dió su hermana, hasta caballitos hace. Cuando la llevamos a la playa, era la felicidad corriendo tras las gaviotas, de pronto se quedaba quieta a observarlas, ver su carita alegre, llena de paz es un verdadero regalo.
Debo reconocer que nosotros somos culpables de haberla humanizado, de haber hecho de ella lo que es hoy, una perra terriblemente inteligente, obediente, cariñosa, si solo le falta hablar. Mila llegó en un momento a nuestras vidas quizás en parte a llenar el tremendo vacío que nos dejaron Shoppina y Dondito que partieron el año pasado.
Quise terminar este año con la vida de Mila, quizás sea la última perra que rescate de los caminos. Lamentablemente los años pasan, y el tiempo te va pasando la cuenta.
Pido disculpas a quienes me siguen desde sus comienzos, a quienes han sido parte de esta obra, a quienes se dan el tiempo para ir al banco a depositar mil, dos mil pesos todos los meses y a nuestras amigas que estoy segura que no nos abandonaran para el año que está a pronto a comenzar. Para todos ellos mi AGRADECIMIENTO hasta el fin de mis días. Podríamos ser mas, de ti depende
Ahora conozcanla en fotos, disfruten ser parte de su vida.
Estamos felices de todo lo logrado este año, han sido muchos los perros que a través de esta página hemos podido dar en adopción, contenta por haberle dado la oportunidad a las hermanitas de Mila, de ser adoptadas, vaya para quienes las adoptaron nuestras bendiciones y agradecimientos. Era imposible quedarnos tranquilos pensando que las hermanitas se quedarían sufriendo en el abandono. Hoy Mila, Cacao, Regina, y Cleo, gozan de una linda familia que se atrevió jugarselas por la adopción responsable, pero aún son decenas los cachorros que necesitan de una familia. Solo tienes que comunicarte aquí.
Termina el año 2014, quiero confiar que el año 2015 serán menos los perros abandonados que existan en nuestro país, de ti depende ser responsable con tu mascota. Amala como si fuera parte de tu familia. ¡Supieras lo lindo que es!
Un deseo no cambia la vida, pero una desición lo cambia todo.
Dios, si alguna vez yo pierdo las esperanzas ayúdame a recordar que tus planes son mejores que los míos.
Muchas felicidades para todos los que se dan el tiempo para leer estas letras que hay veces pienso que solo me importan a mí. Que el año próximo sea mucho mejor que el que se va, y a soñar que llegaran mas personas como la dueña de Mila, para adoptar alguno de los perros del camino.
Gracias Daniela por amar tanto a tus hermanas.
Te amo.
Marcela
[email protected]
NO MAS ABANDONO DE PERROS
Ps. : si hay algún error lo corrijo después.