Revista Cultura y Ocio
Millenium I: Los hombres que no amaban a las mujeres (Stier Larson)
Publicado el 15 febrero 2013 por Nelyjim @Bibliotecallena****POR NELYJIM
Llevo mucho tiempo pensando, desde que leí el primero, si debería esperar para hacer la crítica de la saga Millenium o si hacerlo por separado. Pero como tengo ganas y tiempo (sobretodo tiempo), la decisión está tomada. Tenia ganas como he dicho, porque esta triología (que pena que no haya mas) me ha enganchado de una forma increíble, haciendo que devore los libros a razón del tiempo que tengo libre, sacándolo de donde sea, lo cual no es fácil siendo que los capítulos son bastantes largos, y a mí no me gusta dejarlos a medias.
El escritor Stier Larson, sueco al igual que Camila Lachberg (La princesa de hielo) (es curioso que de repente los escritores suecos sean tan renombrado), tuvo la mala suerte de morir a los pocos días de entregar a la editorial el último libro de esta triología, quedándose así sin ver el fanatismo que se ha creado en torno a Lisbeth Salander y sus historias.
Es curioso que el tema que ha quiso tocar Larsson fuera el maltrato a la mujer. Es verdad que el libro trata de ello, y de alguna forma conforme avanza el libro se ve más claramente pero no lo hizo de forma directa ni demasiado explicita. Tantas historias y personajes hacen que "Los hombres que no amaban a las mujeres" se convierta en una bomba de relojería donde nada es lo que parece, y donde de repente un personaje insignificante se convierte en el centro del mundo.
Intentare centrarme en el primero de estos tres tesoros e intentare no hablar demasiado del segundo, el cual estoy acabando, ansiosa de empezar el tercero. "Millenium: Los hombres que no amaban a las mujeres" ha sido un boom. Así de simple. Ya lo fue el libro, pero después de estrenar la película creo que el éxito se ha ampliado de una forma magnífica. En mi caso, el libro no me atraía demasiado, tampoco entiendo el porque, ya que no sabía muy bien de que trataba. Puede que aunque parezca una estupidez, la imagen de la portada no me hacía pensar que ese libro me iba a gustar. Así que sin haberlo leído me fui a ver la película. Y por supuesto una vez leída... tenía que leerlo. Yo soy de las personas que prefiere ver una película antes de leer el libro, si es que hay que elegir, y en este caso, no puedo decir si acerté o no. Desde luego no me ha influido para que el libro me haya aburrido, puesto que el contenido de este tiene suficientes tramas más que la película como para que el lector pese a saber la trama central se enganche.
Lo que nos presenta Larsson, es la trama en la que se ve envuelto periodista, cuando en no su mejor momento profesional, se hace cargo de una investigación, a simple vista sencilla y sin mucho sentido, que se acabará convirtiendo en el centro de su vida y en la única forma de poner en orden o al menos de volver a tomar las riendas de esta. El personaje de Michael de primeras parece sencillo, con el único aliente de ser el amante reconocido de su jefa y estar involucrado en un tema judicialmente perdido que hará que su carrera esté a punto de terminar.
La investigación ha seguir, la excusa perfecta para todo lo que esconden las páginas del libro, es el extraño y caprichoso deseo del adinerado Henrik Vanger, para que vuelva a investigar el caso de su sobrina Harriet, desaparecida de forma inexplicable y en el momento menos pensado 36 años atrás.
Larsson tuvo la brillante idea de crear numerosos personajes que forman la amplia familia Vanger, todos ellos con unos caracteres marcados y confrontados entre si, de forma que en un momento dado el lector no sabe realmente por quien decidirse para marcar como malo.
El libro va tomando forma y adquiriendo interés poco a poco, presentando la situación de Bloomsbury, y dejando ver pequeñas pinceladas de nuestra heroína. Más tarde presenta la como he dicho excusa para comenzar la verdadera historia, la petición de Henry Vanger, y a partir de ahí, las vidas de los dos personajes principales se van uniendo, se van descartando sospechosos, aparecen nuevos, se descubren nuevas pistas, pequeños pero importantes pasos,.... hasta que el resultado se ve y se ejecuta. Sin embargo Stier Larsson fue tan inteligente como para no dar una solución a un problema y fin, si no que fue mas allá y creo lo que yo considero que es un "final regalo" que hace que el libro no termine dejando al lector como otros tantos libros con la sensación de: y ya está? pues vale. Larsson se recrea en explicar los porqués. Y eso hace este libro fascinante.
Y durante todo este proceso, se acumulan las escenas intensas detalladas con tal precisión, que aun sin haber visto la película antes estoy segura de que impactaran. Millenium no es un libro exento de violencia, todo lo contrario una de las características principales es la crueldad y las atrocidades que se desprenden en la mayoría de sus capítulos. Es un libro cargado a nivel de novela, de historias y personajes pero a su vez cargado de dramatismo y en muchos casos crueldad.
Y en medio de todo esto, aparece ELLA, la verdadera y en muchas ocasiones parece ser, única protagonista. El centro de la historia troncal y de las pequeñas que se van ramificando y de las que surgirán "Millenium II: La chica que soñana con una cerilla y un bidón de gasolina" y "Millenium III: La reina en el palacio de las corrientes de aire" (He dicho que estoy ansiosa por leerlo?). La persona que hace y deshace en la historia según le conviene. El personaje que hace sentir y que convierte el libro en tensión pura, en un "ay", en un no poder parar de leer para saber que ocurre con ella.
Intento escribir sobre el libro, pero es difícil no tener en la cabeza la imagen de Lisbeth Salander en la película mientras se lee.
Haciendo un inciso, creo que la elección de Noomi Rapace para encarnar a este visceral personaje no pudo ser mejor. No solo el físico, que se ha creado al pie de las letras que escribió Larsson (pelo a lo garcon, tez blanca, ojos oscuros, complexión pequeña, ropa negra, piercings en varias partes de su cuerpo, y tatuajes cubriéndola destacando un dragón que cruza su espalda), si no la personalidad que emana, la fuerza, los gestos, la mirada gélida y tan característica de esta nueva heroína.
Lisbeth Salander, hacker brillante y con graves problemas de integración en la sociedad, es la típica persona que si te cruzadas por la calle llamaría tu atención, mirarías con curiosidad y acto seguido cambiarias de acera y bajarías la mirada. Un personaje fuerte, decidido, con un carácter marcado por su inteligencia fuera de lo normal, su fuerte carácter, sus dotes para la informática y un pasado del que apenas se cuenta nada en el principio y que Larsson va convirtiendo de manera críptica en la base de la historia, los problemas de los personas secundarios, y la solución a los misterios.
En este primer libro, Salander se convierte en la ayuda perfecta para Michael Bloomsbury, bordeando la línea que siempre marca Lisbeth con todas la personas y que poco a poco se va difuminando (el que se llegue a borrar es otra historia), y llega a quitar el puesto de personaje principal a este de forma que el periodista se convierte en un actor secundario (para mi tanto en el libro como en la película) que aparece solo cuando la mirada de Lisbeth no está en escena.
Otro inciso, no quiero decir con esto que Lance Henriksen, que encarna al periodista, no haya sido capaz de interpretar su papel de una forma precisa y destacable. Todo lo contrario. Creo que borda el papel tal y como Stier Larsson lo escribió, y es que en mi opinión todo aquel dice que Michael Bloomsbury es el personaje principal de estos tres libros se equivocan. El es la llave para que Lisbeth Salander aparezca en escena, y se luzca, pero de ningún modo es la pieza principal. Y si hay alguna duda, solo se debe seguir leyendo, Millenium I y II.
Reconozco que tanto al leer este libro, como el que ahora estoy terminando y puedo predecir que cuando lea el tercero, la verdadera razón de pasar página tras página es ver qué ocurre, que hace y como se las apaña Lisbeth. La historia es un imán, y las varias historias paralelas o cruzadas que hay te mantienen en vilo, pero siempre es a ella a la que espero ver aparecer.
Es curioso y divertido que he comprobado que todas las mujeres que hemos leído este libro (he sondeado a las amigas) estamos de acuerdo en que tenemos nueva heroína. Todas queremos ser como ELLA, tener su valor, su inteligencia, su saber elegir, su forma de razonar.... pero sobretodo su fuerza.
En resumen este libro (triología) es altamente recomendable, no aburre, engancha, no es monótono, tiene ramas, ramitas y ramificaciones, sus personajes son variados y variopintos, y solo por conocer a la protagonista merece la pena.
Yo de mayor quiero ser como Lisbeth Salander.