El agresivo escrache sufrido este domingo en Alsasua, Navarra, por “España Ciudadana” en una concentración en solidaridad con los dos guardias civiles y sus parejas agredidos por vecinos de allí hace dos años, ha sido justificado, realmente aprobado, por quienes apoyan a Pedro Sánchez, especialmente su propio PSOE.
“España Ciudadana” es una plataforma impulsada pero ajena a Ciudadanos (Cs) como partido, defensora solamente de la Constitución, a la que pueden unirse personas sin militancia o militantes de otros partidos.
Que unos españoles no puedan acudir a cualquier parte del país para un acto legal, y que el PSOE gobernante excuse actos en los que se apedrea, insulta, se le tiran heces a los asistentes y se lanzan campanas de una iglesia al vuelo para que no se oiga a quienes hablan, es declararle la guerra a los derechos y libertades ciudadanas.
Entre los líderes aberzales contra “España Ciudadana” estaba en Alsasua --7.423 habitantes-- Jesús María Zabarte, “El carnicero de Mondragón”, etarra asesino de 17 personas que salió de la cárcel en 2013 con la doctrina de Estrasburgo que liberó a numerosos terroristas.
El portavoz del PSOE en el Senado, Ander Gil, acusó a “España Ciudadana” de “irresponsable por avivar la confrontación entre las personas” al convocar el acto en ese pueblo del noroeste navarro.
Gil denunció a “las tres derechas” en un intento de vincular al liberal Cs con el PP y con el supuesto ultraderechista Vox, aprovechando que dirigentes de estos dos partidos se unieron a la convocatoria de “España Ciudadana”.
No pensaban ni Gil ni el PSOE que numerosas electores reaccionarían en las redes sociales apoyándolos irónicamente porque “Las nucas han provocado a las pistolas”, y repitiendo que las mujeres “No deben ponerse minifalda porque van provocando”.
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SALAS