Y es que claro, tras darse de ostias con varios de sus últimos estrenos televisivos, la cadena de todos (de todo el que les votó, claro está…) ha decidido montarse en la máquina del tiempo y retroceder unos cuantos años atrás para recuperar uno de los programas que tantas alegrías le dio. También pensaron en llamar a la Obregón y hacer un “Ana y los 8”, pero prefirieron no correr riesgos y evitar que Anita se dislocase el cuello bailando en la barra a su edad.
Y aunque los presupuestos van más justos que los escotes de Yola Berrocal, se lo han currado de lo lindo y nos han plantado hasta un nuevo maestro de ceremonias para hacer las delicias de los sexagenarios telespectadores que quieran disfrutar de tamaño show musical. Jaime Cantizano se incorpora así a las filas de la cadena pública en su regreso a televisión para dotar al show de la chispa y ritmo que necesita (y siempre han sabido darle) y que Mariñas pueda darse una alegría desde casa.
Entre las novedades: temas mucho más actuales para mover el esqueleto, un nuevo plató enorme donde los VIPS podrán menearse a sus anchas, un título semanal de “pato mareado” otorgado al bailarín más torpe y desastroso (en honor a los bailes que se pegaba la Esteban en su época dorada) y un nuevo jurado que intentará sacar el Fred Astaire que los nuevos concursantes llevan dentro: El Sevilla, poniendo su experiencia como concursante en el “Más que baile” telecinquero al servicio de TVE en lo que podía llamarse un tránsfuga televisivo; Noemí Galera, tras ser destronada por Risto Mejide como miembro más borde y cruel de cuantos habitan las sillas del jurado; el bailarín y coreógrafo Ángel Corella; y ELLA, la vedette por excelencia, una Norma Duval que vuelve a pisar la televisión como emblema de la nueva apuesta de la cadena de las gaviotas a la que ella tanto animó al voto en sus años mozos y lozanos.
Pero si algo nos importa en estos concursos es el casting. Ver a rostros conocidos dando vueltas por los aires mientras rezamos porque cautiven al jurado o se partan la crisma… (dependiendo del caso). En esta edición hay de todo:
Adriana Abenia: La reportera y presentadora se pone los tacones para demostrar que sobre la pista derrocha tanta energía y buen rollo como lo hace ante las cámaras. Con que la guapa rubia ponga un poquito de su simpatía sobre el escenario, se los habrá ganado a todos.Felipe López: Nadador y guapo por excelencia que dejará a su pequeña Inés y su amada y bella Mireia Canalda (¡a la que postulo para la próxima edición desde ya!) en casita para demostrar que no hay ritmo que se le resista a su 1,98 de alturaMarina Danko: Esperemos que sus años al lado de Palomo Linares le sirvan al menos para manejarse con el Pasodoble… Pero vamos, que ni pena ni gloria.Miguel Abellán: Pues por muy majo que me digan que es este muchacho, lo de que sea torero ya me echa pa´tras. Aún así, le damos un voto de confianza.Corina: Se presenta ante el baile de gala sin haber encontrado su príncipe azul entre aquel sinfín de ranas que le plantaron a la pobre muchacha, pero va sobrada de belleza y juventud para que ningún baile se le ponga por delante.Colate: El ex de Paulina ha decidido dejarse de demandas millonarias y currar un poquito. Y no ha encontrado nada mejor que marcarse unos bailes delante de media España.Maribel: El psicólogo le ha recomendado que no hay nada mejor para dejar la Alcachofolia que bailar como una loca por la tele. Pues eso.Fernando Albizu: Actorazo de peso que viene para demostrar que la energía y el ritmo no son una cuestión de kilos.
El resto, ya es de sobra conocido. Un ganador que donará su premio a una ONG y un espectáculo tan familiar y blanco que bien lo podría patrocinar una marca de detergente.¡Hagan sus apuestas!Por Sergio Mata