Miraculina: todo dulce todo el rato
¿Te imaginas comer un limón, un pomelo o un café y que sepa dulce? Pues es posible gracias a una sustancia llamada miraculin o miraculina.
No es casualidad que esta sustancia se llame miraculina. Su nombre procede del francés miraculeux, o del inglés miraculous milagroso, extraordinario.
Historia
La miraculina se encuentra en la mayor farmacia del mundo: la Naturaleza.
El francés Reynaud Des Marchais, un explorador, navegante y cartógrafo de la corte del rey de Francia, la describe por primera vez en sus viajes al África occidental entre 1704 y 1727. Des Marchais describe a los nativos comiendo las bayas de un arbusto.
Bayas de Synsepalum dulcificum