Siempre me habréis oído que el embalse de Cuerda del Pozo es un maravilla. Pero ahora verlo resulta un poco triste. La pertinaz sequía ha conseguido dejarlo por debajo del cuarenta por ciento de su capacidad, cuando el año anterior superó el noventa. Ahora se descubren inmensos arenales y infraestructuras que no suelen estar a la vista, como el puente Romano de Vinuesa y este otro que ni sabía que existía, entre Molinos de Duero y Abejar.
En esta última foto se puede apreciar la cantidad de agua que falta. A pesar de todo el pantano sigue teniendo mucho encanto.
Y desde luego imágenes increíbles.