Si estáis alegre, miradle resucitado;
que solo imaginar cómo salió del sepulcro os alegrará.
Mas ¡con qué claridad y con qué hermosura!
¡Con qué majestad, qué victorioso, qué alegre!
C 26, 4
Si estáis alegre, miradle resucitado;
que solo imaginar cómo salió del sepulcro os alegrará.
Mas ¡con qué claridad y con qué hermosura!
¡Con qué majestad, qué victorioso, qué alegre!
C 26, 4