Revista Música
The smiths – homonimo
La caracterización del individuo por sobre la masa en que se camufla o de la que trata de separarse, asi hace ver el rock (mas pop) o la corriente post-punk la banda en cuestión. Porque detrás de toda gran revolución, detrás de toda marcha, protesta, movimiento, ola o lo que sea que involucre una acción masiva, se encuentra siempre un individuo, la suma de los intereses de estos son los que explotan en esa marcha, pero siempre siempre detrás habrá una solitaria y pequeña persona con sus propios intereses y vida, independiente de lo que crea.
Esto es lo que hace ver, el buen Morrisey con sus letras introspectivas y sufrientes, tan sufrientes y tan sensibles a ratos que parecen un mal chiste, de esas texturas que no sabes bien, si es tan real, o tan falso que te están tomando el pelo, o una ironía tan bien compuesta, que solo su maquinador sabe realmente donde apunta. Por otro lado ajeno a cualquier suspicacia que se pudiese devengar de estas particularidades, no se puede esperar menos de alguien que eventualmente, nunca tuvo un lazo demasiado marcado con su padre, inclinándose más que nada por el apoyo materno. Datos que sirven para contextualizar una tendencia hacia esas dimensiones paradigmáticamente mas femeninas, y con tendencia a desafiar el orden jerárquico impuesto por una sociedad masculinizada, donde las figuras paternas han de ser casi inaccesibles o bien, reforzar su fortaleza. También su afición literaria, que sin duda le cedió una pluma ágil y a la vez contundente a la hora de disparar sutilezas en sus letras, reconociéndose a si mismo como un deudor natural de Oscar Wilde, figura a la que sin dudas le rinde pleitesía normalmente.
Johnny Marr, vendría siendo el comburente por antonomasia de la formula, que mas implota en sonidos sugerentes, tan cristalinos y pausados que parecieran dar las dobles lecturas a la acidez lírica. ¿Quién diría que este tipo, tenía una prominente carrera como futbolista?. Si asi mismo, mas en sus propias palabras estaba listo para formar parte de las líneas del Manchester City, extinguiéndose esta posibilidad, porque habría sido el único jugador, que usase delineador xD. Su funcionalidad en la banda se ve la de moderador y acentuador; haciendo ganar a las composiciones esa elegancia a ratos tan pausada, que destila el sonido de The smiths, algunas versiones dicen que el nombre de la banda proviene directamente de el apellido mas común y corriente del Reino Unido, y querían acentuar a las personas comunes y corrientes, poniéndolas en primer plano asi como también ronda la posibilidad que este haya sido tomado del denunciante de los asesinos de los Paramos, cual sea de las dos tienen una justificación mas menos creíble y algo irrelevante.
En cuanto a la panorámica del debut, es dispar en relación a las expectativas que se le tenían por allá en los fatídicos 80’s. Se pensaba en una catarsis rabiosa muy punk, con benevolencia cero y el nihilismo habitual en los rencores de esa corriente, mas opuestamente a eso, la armonía de “Los smith” en esta primera entrega, deja abierta las posibilidades a su sonido, un pop sarcástico, mas refinado, pausado, que malogra algo el ritmo y se vuelve un poco tedioso en pasajes, no obstante es su naturaleza, mas que acelerado y bailable, se va por el lado de catarlo en dosis pequeñitas, resultando una ecuación de muy buen gusto. Provisto de un montón de aluciones a diversas carteras culturales, como su portada que es la fotografía de Joe Dallesandro, un actor que solía actuar para Andy Warhol. Elevando esa cultura callejera, desechable y no por ello menos intensa. En momentos (esto se debe recalcar) no se siente como una entrega atemporal que trascienda, es muy de su época, eso se inscribe por cada vena y segundo de reproducción, algo de los fantasmas y sonidos ochentosos se dejan caer fuerte, provocando unas ligeras vacilaciones.
Ello no logra opacar (tanto) el desempeño primigenio, que finaliza como un souvenir cáustico y algo excesivamente pomposo, más luego de esa grandilocuencia se viene un festín acido, muy pero muy acido, controvertido hasta decir basta. Cosa de mirar el revuelo ante esas tergiversaciones que simulaban erróneamente alusiones a la pedofilia, , y como siempre los malos entendidos, terminan armando un espectáculo circense, hubo gente que se creyó pasada a llevar siendo que los tiros iban por otros lados. Aunque con estos tipos nunca se sabe.
En definitiva y para cohesionar, a ese escucha tras el sonido, un album engañoso, diáfano en ocasiones, teatral en otras, para degustarlo separadamente, más todo ello parte del plan perfecto de Morrisey, un personaje dramático, que pronto volvería...y esa ocasión con más revuelo…
· Tracklist
· Reel around the Fountain
· You’ve got everything now
· Miserable Lie
· Pretty girls make graves
· The Hand That Rocks The Cradle
· This Charming man
· Still Ill
· Hand in glove
· What Difference Does It Make
· I Don't Owe You Anything
· Suffer Little Children