"¿Es también hoy el día de las mujeres que estamos en paro?" (Wynie Smith)
Hoy, Día Internacional de la Mujer Trabajadora, he invitado a desayunar a mis amigas. MIS AMIGAS He preparado unas deliciosas rosquillas fritas, cuya receta podréis ver mañana en estas páginas. La primera conversación del grupo ha girado en torno al propio nombre de la onomástica en cuestión. Todas hemos estado de acuerdo en que el calificativo “trabajadora” debería suprimirse del título y dejarlo en “Día Internacional de la Mujer”, trabaje o no.
-¿Que pasa con nuestras madres, la mayoría de las cuales no han trabajado fuera de casa en toda su vida? ¿No tienen derecho a celebrar su día? ¿Tampoco es hoy el día de las mujeres que estamos en paro y sufrimos doble crisis, la económica y la provocada por la desigualdad?, protesta Wynie Smith.
-Lo que se celebra hoy, en realidad, es la lucha de la mujer por su participación en la sociedad en las mismas condiciones que el hombre. Un pilar fundamental para conseguir esta meta es el acceso a un puesto de trabajo remunerado, aclara Emi. No obstante, yo también creo que debería suprimirse la palabra trabajadora y dejarlo enDía Internacional de la Mujer, a secas.
-A mí lo que me gustaría saber es cuánto tiempo tendrá que pasar para que la igualdad sea real y efectiva y esta celebración pierda su sentido, interviene Olivia N.
-Uff!, salta Katty Lloyd. No vamos a negar que se ha conseguido mucho, pero el camino es aún más largo. Fijaros en nosotras, sin ir más lejos. Estamos aquí cinco mujeres, todas con estudios universitarios y años de experiencia profesional. Y soloEmi, es decir, una de cinco, tiene un trabajo digno y estable. Las demás nos vemos obligadas a buscarnos la vida para alimentar a nuestros hijos, en la mayoría de los casos, sin ayuda. Y ahora mirad al otro lado, al de nuestros ex maridos. Todos contrabajos estupendos y encima, no nos pasan ni un euro.
-Por ellos, como si tenemos que dormir debajo de un puente. Están muy bienamparados por la famosa custodia compartida y las leyes presuntamente progresistas, añade Wynie levantando el tono de voz. Es vergonzoso en un país donde las mujeres todavía pierden sus trabajos por quedarse embarazadas, o les preguntan si piensan tener hijos antes de contratarlas. Por mucha custodia compartida que haya, la ley debería proteger a la madre en una situación desigual, que se da con tanta frecuencia. Que arreglen primero la discriminación de base y dejen las florituras para luego. Una casa se construye desde los cimientos, no se empieza por el tejado, matiza.
-Ya sé que habéis sufrido mucho con la custodia compartida pero es lo mejor para nuestros hijos, puntualiza Katty clavando su mirada clara en Wynie y en quién suscribe estas líneas. Ellos también deben tener el derecho a educar y disfrutar de sus hijos.
-Bueno, de eso podríamos hablar largo y tendido, pero ahora no es la cuestión. El meollo del asunto -explica Wynie- es que, en la mayoría de los casos, somos las mujeres quienes sufrimos el paro y la discriminación mientras ellos continúan sus cómodas vidas, agazapados detrás de sus puestos estables. Fijaros en nuestros propios casos y los de nuestros ex maridos, no tenemos por qué ir más lejos. SalvoEmi, todas nos hemos visto apuradas en más de una ocasión y los padres de nuestros hijos, amparados por la ley, se han negado a ayudarnos.
-Bueno, no creo que eso tenga que ver mucho con la ley. Se niegan porque sonmalas personas, observa Olivia. El mío sí me pasa una buena pensión. En primer lugar, porque soy yo quien cuida a nuestro hijo y en segundo, porque me lo robó todo. Lo sabe y paga con dinero el dormir tranquilo cada noche. Y los vuestros no os dan ni un euro porque no soportan que los hayáis dejado, punto.
-Y porque la ley les permite hacerlo, no te olvides, replica Wynie. En custodia compartida cada padre paga los gastos del niño durante su tiempo de estancia, sin que ninguno de los progenitores esté obligado a pasar pensión alimenticia o de otro tipo al otro. Dicho así, parece lógico. Sin embargo, no lo es en España, donde las mujeres sufrimos una enorme discriminación laboral. En puestos iguales cobramos menos que los hombres y aún se siguen dando numerosos casos de despido por el simple hecho de ser madres.
-Que se erradicarían si la baja maternal se repartiera por ley entre ambos progenitores, añade Emi. El hecho de despedir a las mujeres por quedarse embarazadas perdería su sentido en caso de que los hombres se vieran obligados a dejar sus empleos el mismo tiempo que las mujeres para cuidar a sus hijos.
-Esa teoría está muy bien, pero te olvidas de que somos las mujeres quienes tenemos que amamantar, no ellos. Las leyes parlamentarias no pueden obviar a laLey natural, interrumpe Katty...
La conversación continuó por derroteros similares, pero aquí la dejo. Y espero que vosotros dejéis vuestros comentarios y observaciones a este debate. ¿Cómo veis la situación de la mujer en España, sea o no trabajadora?
RoCastrillo