MIS VIAJES (y II)

ago
14
2014 Escritor // Miguel Benavent de B.

MIS VIAJES (y II)

Escrito por Miguel Benavent de B.   Sin comentarios

Continuación…

Sin desmerecer la belleza de los paisajes, no hay nada tan maravilloso como profundizar en la mirada de las gentes que los habitan. En una mirada puedes ver la historia escondida, el corazón despierto y cómo vive y ha vivido una persona. Por eso los lugares los hacen especiales las personas. En cualquiera de mis viajes -aunque sean por las calles de Barcelona- contemplo a las personas y me recreo en ellas. Tal vez de ahí venga mi reparo de fotografiar gentes, sin pedirles permiso. Cada uno muestra y se muestra como y cuando quiere, solo le delata su mirada. Como la mía cuando lo contemplo.

Hay lugares cercanos o lejanos que conmueven el Alma. ¿O es que el Alma es quien conmueve a esos lugares y a las gentes que la visitan? Colores, sonidos, aromas, texturas en diferentes lugares del mundo despiertan nuestros sentidos, si estamos bien atentos. Pero, muchas veces, visto uno, vistos todos, por algo viajamos siempre y a todo lugar con lo que en realidad somos y sentimos. ¿Quién no ha soñado escapar a algún lugar lejano para olvidar o para volver a empezar de nuevo? Inútil escapada con una maleta llena de cosas para solo olvidar o para evitar, en vez de ir vacía para recibir lo nuevo! Cuando paseo o viajo, intento ir siempre sin equipaje y con el corazón abierto de par en par, para llenarlo de emociones y experiencias nuevas y para recordar. Me gusta pensar que, a cada instante, estoy escribiendo mi propia historia y guardo imagen a imagen lo que quizás algún día será esa última imagen soñada que aparecerá justo antes de morir…

Cada lugar que visitas es único e irremplazable, a cada instante. No hay ni puede haber dos nubes ni cielos iguales, ni dos olores, colores o aromas, que no cambien, a cada instante. Por eso quizás viajar es vivir cada instante intensamente, estés donde estés, cuando estés y con quien estés. Todo cambia, todo se rejuvenece y renace cuando tu corazón lo visita, pues hasta ese momento era un simple paisaje inherte, carente de la emoción que tu le aportas en cada mirada. No hay lugar bueno o malo, maravilloso o que merezca ser olvidado, pues de ti depende que lo hagas mágico como tú y vivo porque con él compartes un trozo importante de tu propia e irrepetible vida! Tú, desde ese mismo momento en que visitas algún paisaje, ya formas parte de él para siempre, porque tu Alma lo impregna de tu presencia eterna, aunque después estés aparentemente ausente!

Etiquetas: alma, viajes, vida