Los vehículos van equipados con neumáticos de invierno, teniendo la precaución de tener siempre el depósito lleno y conducir con suavidad. Debiéndose informar en todo momento del trayecto a para facilitar la localización del operario.
En este último año han sido muy justificadas todas las medidas que operarios como fontaneros, albañiles y pintores han debido tomar para evitar accidentes por climatología adversa en zonas tan complicadas de gestión como pueden ser Huesca, Teruel o Soria por poner un ejemplo, a pesar del peligro que muchas veces se asume para la realización de su trabajo.
Consultar la previsión del tiempo en la ruta que se piensa seguir y también las posibles alternativas por si la cosa se pone más fea de lo previsto. Siempre llevar el teléfono móvil en el vehículo y ropa adecuada.
En Gremisa, se imparten cursos de circulación en nieve y hielo para evitar los problemas en el servicio. Por ejemplo, cómo frenar en situaciones concretas a pequeños toques para controlar la dirección, de modo que no se vaya el vehículo o conducir con mucha previsión, adecuando la velocidad. Al patinar, levantar el pie del acelerador y controlar el vehículo solamente con el volante hasta colocarlo donde se vuelve a tener tracción.
Se aconseja no dejar el freno de mano tirado al máximo, porque al bajar mucho las temperaturas puede congelarse y costará mucho quitarlo. Lo mejor en estas ocasiones es dejar una marcha engranada y el limpia parabrisas dejarlo despegado del cristal y, mejor aún, colocar un cartón o una manta entre el limpia parabrisas y la luna.
De todas formas, desde Gremisa se quiere felicitar y a la vez agradecer a todos los gremios que siguen haciendo que la vida sea más fácil a pesar de los frecuentes siniestros dejando imágenes inéditas para el recuerdo.