Parecía algo evidente, al menos para mi, que una continuación de las aventuras del agente Ethan Hunt, volviera a la gran pantalla, luego del enorme éxito del cual gozó la tercera película dirigida por el visionario J.J. Abrams, hace ya cinco años. Y es que luego de la magnifica adaptación que Brian De Palma hiciese con el agente norteamericano, inspirado en la serie televisiva del mismo nombre, allá por el año de 1996, su posterior secuela no hizo más que sembrar dudas. Dudas sobre si en esencia el tan famoso agente de la CIA podría enamorar al público con más aventuras o misiones, cómo le gusten llamar, personalmente me declino por lo primero. Y es que la secuela, dirigida por John Woo, no hizo más que aburrir y destruir lo bueno e interesante que la película original había aportado.
Con la llegada de Abrams al mando de la saga, todo dio un giro de 360 grados y la franquicia pareció volver a emerger, si bien no tan maravillosa y entretenida cómo la obra original, si mucho mejor que la secuela de Woo, es por ello que ahora, y gracias a la insistencia del protagonista, nos referimos a Tom Cruise, un actor ya en la parte final de su carrera, cómo buen actor me refiero, se hizo posible una cuarta entrega, misma que estaría dirigida ni más ni menos por el brillante director Brad Bird, conocido por sus excelentes trabajos animados cómo `El gigante de acero’, `Los Increíbles’, y `Ratatouille’, estás dos ultimas bajo las ordenes de Pixar, siendo la ultima, por mucho, la mejor de esa casa productora. Así que con Bird al mando, y con un Cruise más comprometido que nunca, ya que produce de su propio bolsillo, cabria esperar algo serio y muy interesante. Y el resultado no defraudara, se los aseguro.
`Misión imposible: Protocolo fantasma’ toma lugar algunos años después de `Misión imposible 3′, y nos sitúa en un principio en dos lugares diferentes, primero en Budapest, donde seremos testigos de una persecución y asesinato muy bien logrado, pasando rápidamente a Moscu, donde los agentes Carter, una hermosísima Paula Patton, y Dunn, un divertido Simon Pegg, se infiltran a una prisión de máxima seguridad para liberar al agente Ethan Hunt (Cruise), el cual fue sentenciado, luego de intervenir en una operación de manera extraoficial, al intentar tomar justicia por su propia mano. Con el plan de rescate logrado de manera divertida y satisfactoria, el agente Hunt deberá ahora con ayuda de Carter y Dunn aceptar una nueva misión, misma por la cual fue liberado de prisión, y que consiste básicamente en averiguar todo lo posible con respecto al asesinato en Budapest, el cual esconde varios secretos, propios una buena película de espías.
El párrafo anterior en si resume los primeros minutos de la película, misma que desde su comienzo no da lugar a ningún respiro, muy por el contrario, va en crescendo hasta llegar a secuencias tan colosales cómo la filmada en Dubai, para ser más especifico, en el edifico más alto del mundo, la torre Burj Khalifa, una secuencia de acción tan bien filmada y lograda, que es sin duda alguna, la mejor en toda la franquicia, y probablemente de lo mejor del año. Mismo caso con el tramo final, desarrollado en Mombay, India; y del cual se hacen múltiples guiños y referencias a las tres películas anteriores, prueba de ello la escena en los ductos de ventilación. Y podría seguir nombrado más, pero les arruinaría su maravilloso viaje en sus butacas, un viaje que los divertirá y mantendrá al filo de su asiento de principio a fin. Y eso, en estos tiempos, es de agradecer.
Claro que también para que una buena cinta de acción funcione, necesita a un buen reparto de actores, y en ese apartado, esta película también los cumple. Todos y cada uno de los personajes de la historia están bien definidos y estructurados, manteniendo con ello su esencia en la historia e identificación con el público. Mención especial merece el personaje de Jeremy Renner, el cuarto integrante del grupo de Hunt, el cual brinda momentos muy elocuentes y refrescantes a la saga, haciéndonos pensar, que podría ser, en un futuro, el sucesor de Tom Cruise al mando de la saga. No tengo problemas con ello, más habiendo visto esta ultima película.
En lo que respecta al apartado técnico, diré que esta en su línea, sobresaliendo de manera muy impresionante, el impactante diseño sonoro, mismo que hará sentir los golpes, disparos y persecuciones de un alto grado de realismo, lo mismo con la música de Michael Giacchino, exquisita y con altos grados de adrenalina en cada escena que quitan el aliento, cómo los maravillosos créditos iniciales. En cuanto a los efectos visuales, diré que están bien logrados, aunque se noten algunas pequeñas fallas en ciertas escenas, pero que en realidad no afectan en casi nada, a menos que seas de esos que les resulte imposible romper las leyes de la física. Porque si es así, mejor abstente, ya que la mayoría de escenas de acción son de un alto grado de complejidad que podrían rayar fácilmente en lo inverosímil. Es cuestión tuya si lo tomas por su lado o no. Personalmente me deje llevar por esta maravillosa y divertidísima historia, que poca importancia le tome a lo que a priori podría resultar poco creíble. Vamos, es una película de acción.
Para finalizar esta crítica les recomendare ampliamente esta opción en cartelera, cómo un mero y agradable entretenimiento de calidad que bien vale la pena ver en una sala de cine, acompañado de tu familia o amigos, inclusive con la novia(o), pues pasaran un rato muy relajante en esta parte final del año que se nos va. Posiblemente junto con `X-Men: Primera Generación’, el mejor Blockbuster del 2011. Solo queda decir a Bird, Cruise y demás involucrados aquí, “Misión: Cumplida”.
Calificación: ★★★★☆