Mme Hardy: la belleza incombustible del blanco

Hace apenas una semana la climatología atlántica nos estaba regalando los últimos coletazos de un temporal de agua y viento bastante agresivo, sobre todo teniendo en cuenta la época del año en la que estamos. Toda una rareza meteorológica. Dicen que en las dificultades es cuando se conoce a las personas. Añado, en las dificultades, la mano jardinera es cuando aprende a reconocer las plantas resistentes.
Año tras año, es asombroso que un rosal de apariencia tan delicada como Mme Hardy (Hardy, 1832) se desenvuelva con tanta soltura tanto al sol, como a la lluvia. Resiste, persevera y gana por goleada....

Félicité Hardy era la esposa de Julien-Alexandre Hardy, y a ella dedicó su obra maestra, un maravilloso rosal blanco, que muchos expertos consideran una de las mejores rosas de la Historia. Julien-Alexandre fue director de la École des Rosiers, ubicada en el Jardin du Luxembourgh, anexo al palacio del mismo nombre, Palais du Luxembourg, actual sede del Senado francés. El origen de estos jardines se remonta a la época en la que (la malévola) María de Médici era reina de Francia. Fue comprando los terrenos que rodeaban el palacio, entre 1614 y 1631. A mí, tan aficionada a las novelas de Alexandre Dumas, no deja de resultarme chocante que una mujer  sibilina y astuta como María de Médici tuviera la suficiente sensibilidad como para mandar crear un jardín. Difícil de conjugar con su fama de envenenadora,... pero bien es sabido que los florentinos adoran todo lo relacionado con la estética, y los Médici, más todavía :)))).

Mme Hardy es una rosa blanca con forma de roseta, aunque no blanca-blanca cuando está comenzando a abrir, presenta una leve tonalidad pastel en esa etapa, que va clareando hasta el blanco. Tiene un estupendo botón verde, y un aroma delicioso. Según HelpMeFind, el análisis de ADN ha demostrado que es genéticamente muy próxima a Bullata y Petite de Hollande. Para Harkness, se trataría de un 'híbrido de rosa Portland y damascena, con gran influencia de centifolia en las flores'. Es obvio que el ADN ha confirmado la impresión visual de Harkness. Por lo general, la podemos encontrar a la venta agrupada como rosa damascena. 
Florece en madera vieja, durante varias semanas, una vez al año, con una profusión y resistencia notables. A mí, personalmente, no me desagradan en absoluto las rosas de una única floración, ya que estimo que cada rosa tiene su propia personalidad. Pero, sí es cierto que hay aficionados al jardín que prefieren las de floración repetitiva, aún a sabiendas de que esa repetición no siempre es satisfactoria. En todo caso, cada quien debe seleccionar lo que más acomode a sus gustos y espacio disponible.
"Una rosa es una rosa es una rosa". Gertrude Stein.