Si Karl Lagerfeld nos propuso un viaje al mundo de ciencia ficción de estilo cartoon en su colección alta costura primavera-verano, la de invierno ha sido como un atracón de realidad. Entendiéndose realidad como un concepto completamente sui generis tratándose de una colección de costura.
Esta estética terrenal ha sido provocada por varios elementos. Para empezar, el colorido ha sido rotundo –en la medida de intenso- pero apagado, plagado de tonos marinos, camel, burdeos, botellas y negros. Para continuar, los cortes han sido limpios y con pocas sorpresas visuales, y se han basado en el esquema de las mangas ranglan que contribuyen a forzar una silueta redondeada de aire retro. Las chaquetas cortas y las faldas largas así lo corroboran.Los tejidos, corpóreos y fuertes, como la lana y la piel, han unido esfuerzos para construir esta línea estructurada, que sólo se ha permitido alguna ligereza hacia el final de la colección en una deliciosa serie de vestidos de tul bordados.
En definitiva, ha sido una propuesta mucha más cercana en su planteamiento a la colección París-Shanghai. Despojada, eso sí, de cualquier referencia pseudo militar y oriental. O mejor dicho, sustituida esta por una cierta decadencia de posguerra en clave sofisticada.Fuente:Vogue.esNota de Autor: Clasico y Moderno, aggiornado a los tiempos que corren....Magnifica Coleccion!Sigue la Moda y Tendencia mundial en http://www.modaencordoba.com