Durante nuestra vida, vamos aprendiendo sin cesar. Empezamos desde que salimos del claustro materno, y lo primero que tenemos que hacer es aprender a llorar, para entre otras cosas, demostrar que estamos vivos.
Poco a poco aprendemos a sentir que ya no estamos cómodamente en donde estábamos en ese claustro, y tenemos que aprender a comer. Más tarde a distinguir en qué nuevo hábitat nos han puesto.
Y así 'pian-pianito' comenzamos a dar nuestros primeros pasos, no sin antes hacer toda clase de cabriolas de circo jaleadas por nuestros progenitores. Así pues, cuando vemos y sentimos que nuestras piernas nos responden a los impulsos de nuestros deseos para ir de un lado para otro, entonces comenzamos un 'contra- aprendizaje'.
Resulta que oímos y volvemos a oír eso de 'niño, estate quieto', 'niño eso no se hace' 'no te subas ahí', ' niño, eso no está bien'.
En fin -dando un salto en este aprendizaje- nos damos cuenta que hemos fallado a nuestra gente, no hemos actuado con las pautas que nos enseñaron, en definitiva no hemos actuado con las ideas que nos inculcaron.
Y cuando ya tenemos los derechos y deberes, entonces empezamos a aprender a ser rebeldes, decimos a muchas cosas que no, que esas cosas no son las adecuadas; comenzamos entonces otro 'contra-aprendizaje', pero esta vez ya con más años, y eso (en principio) debería ser mejor, pero nos dicen que no, que es todo lo contrario, que es incluso mucho peor.
Pero lo peor de verdad de todo este aprendizaje y contra-aprendizaje, es cuando ya empezamos a creer en la gente en general y llega la realidad (que es a veces muy tozuda) y nos da en toda la cara y ¡zas!, ya no hay remedio.
Hemos creído que hemos aprendido lo que es la democracia, y sin embargo la realidad es otra, una realidad muy cruda, y encima no podemos hacer nada, sólo cabrearnos y la indignación a tope todo el día sin parar.
No sabemos porqué existen personajes como Fátima Báñez, Ana Mato, Ana Botella, Carlos Fabra, José Manuel Soria, Sonia Castedo, Luis Bárcenas, Juan Cotino, Mónica de Oriol, Morenés, Rafael Spottorno, Wert, Rodrigo Rato, Miguel Blesa, y cómo no Mariano Rajoy, no sin antes apuntar que Jaume Matas (según el presidente del Gobierno de España) es un modelo de conducta.
Y me pregunto: ¿cual es el método de nuestro aprendizaje, para llegar al mejor modelo de conducta?