Comunicado escrito por Mohamed Hallab:
"Después de 30 días de huelga de hambre reclamando el derecho de beneficiarme del programa de visitas, he decidido suspender la huelga en respuesta a la petición de mi madre y familia y como respuesta a la carta que recibí el sábado pasado de la sociedad civil saharaui.
También he recibido la visita de la vicepresidenta del Departamento Del Norte de África Y Medio Oriente de ACNUR, la señora Ohashi Shimozawa Shoko, la cuál me expresó la preocupación sobre mi caso y me dijo que seguirían trabajando sobre éste para encontrar una solución. También me ha expresado el compromiso de la organización para hacer posible que vea a mi madre mientras unen esfuerzos para que pueda visitar la ciudad ocupada de El Aaiún y visitar al resto de mi familia en el futuro.
Me gustaría reiterar que Marruecos no tiene ningún derecho a cuestionar mi posición política y no se le debería permitir que reprima los derechos de los refugiados saharauis que se benefician de este programa “puramente humanitario” como castigo por sus posiciones políticas. También me gustaría reiterar que tengo un derecho inalienable a expresar mi posición política y no permitiré que nadie me prive de expresarlos. Lo más importante es mi firme convicción de que Marruecos es la única fuerza de ocupación de facto y que no tiene ningún derecho de soberanía sobre el Sahara Occidental, ni ningún derecho de prohibir a los saharauis expresar sus derechos sagrados de autodeterminación e independencia. Algo reconocido en el Convenio Internacional De Derechos Civiles y Políticos y en el Convenio de Derechos Sociales Económicos Y Culturales y en el resto de tratados internacionales.
Finalmente, me gustaría agradecer a todos los miembros del Comité que han seguido mi situación día y noche y a todos los jóvenes, Saharauis y extranjeros y a todas las organizaciones que me han apoyado. También me gustaría expresar mi gratitud a todos los ciudadanos que han seguido mi caso, y a las autoridades Saharauis, representadas por el Ministro De Salud que se han encargado de ofrecerme atención médica diariamente, y a todos los hijos e hijas de la resistencia Saharaui en las zonas ocupadas del Sahara Occidental que me han apoyado, y digo: Los derechos no se perderán mientras alguien luche por ellos.
Muchas Gracias por su apoyo".