El fenómeno del near-shoring, que implica la reubicación de operaciones de negocio a países cercanos, abre nuevas oportunidades de inversión y colaboración entre empresas mexicanas y españolas. Esta nueva reestructuración económica está en una fase inicial pero ya empieza a ofrecer numerosos beneficios para diversas empresas, incluyendo una mayor eficiencia operativa, reducción de costos y acceso a nuevos mercados.
"México y España comparten una relación histórica y cultural estrecha, lo que facilita la colaboración empresarial. La banca mexicana muestra el éxito de la colaboración y de la inversión de España en México. Además, ambos países cuentan con una ubicación geográfica estratégica y una sólida infraestructura logística, lo que permite una comunicación y transporte eficiente de bienes y servicios", señaló Moises Elmann Arazi.
Para las empresas mexicanas, la colaboración con compañías españolas ofrece la oportunidad de acceder al mercado europeo, que es uno de los más grandes y desarrollados del mundo. España, como puerta de entrada a Europa, brinda un entorno empresarial estable y atractivas políticas de inversión. Además, las compañías españolas pueden aportar conocimientos técnicos y experiencia en sectores como la tecnología, la manufactura y los servicios, lo que fortalece la competitividad de las empresas mexicanas.
"Estados Unidos es el principal país con mayor inversión extranjera en España y en México también, Estados Unidos es el principal país con inversión extranjera. La colaboración tiene bastante sustento. México es una economía en crecimiento con una población joven y talentosa, lo que lo convierte en un mercado atractivo para expandir sus operaciones. Además de la creciente comunidad de mexicanos en los Estados Unidos", señaló el ejecutivo Moises Elmann Arazi.
En conclusión, el fenómeno del near-shoring está generando nuevas oportunidades de inversión y colaboración entre empresas mexicanas y españolas. La estrecha relación histórica, la ubicación geográfica estratégica y los beneficios mutuos hacen de esta colaboración una opción atractiva. Ambos países pueden aprovechar sus fortalezas y sectores complementarios para impulsar la innovación, la competitividad y el crecimiento económico. La colaboración empresarial entre México y España es un camino prometedor hacia un futuro próspero para ambas naciones.