Muchos estudios han demostrado la malignidad de los perturbadores endocrinos, moléculas químicas que se encuentran en muchos alimentos y en una gran variedad de productos comercializados, especialmente en los juguetes para niños.
En Estados Unidos, cada que nace viene acompañado por más de 100 moléculas químicas que pueden detectarse en la sangre.
Entre 1990 y 200, en el Estado de California se registró un aumento de un 600% de los casos de autismo.
En Finlandia, desde hace 20 años el cociente intelectual ha descendido 2 puntos por década.
Según muchos expertos todos estos datos están provocados por los perturbadores endocrinos que encontramos en alimentos, en los embalajes y en muchos productos del hogar tanto de limpieza como de mantenimiento.
Los perturbadores endocrinos se encuentran en muchos juguetes y artículos de plástico dirigidos a los más pequeños. Por ello es especialmente recomendado tratar de evitar la exposición de los bebés a este tipo de artículos.
Este es el tema centra de un reciente documental emitido por la cadena de televisión franco alemana ARTE TV.
El documental, titulado "Demain tous cretins? (¿Todos estúpidos el día de mañana|?), recoge las impresiones de varios investigadores franceses y estadounidenses que, desde hace tiempo, estudian el descenso de la capacidad cognitiva en poblaciones occidentales y su relación con la presencia de moléculas químicas en muchos productos que se encuentran en la mayoría de hogares de todo el mundo.
Este tipo de moléculas, que fueron catalogadas por la OMS como perturbadores endocrinos, provocan alteraciones del sistema hormonal.
Lo grave del asunto es que estas sustancias se encuetran en todos los momentos de nuestra vida cotidiana.
Las encontramos en los plásticos, los cosméticos, las pinturas, los productos de limpieza de alfombras conteniendo retardantes de llama, etc.
Las personas más expuestas a estas moléculas son las mujeres embarazadas, especialmente durante los primeros meses de embarazo.
Otro detalle a resaltar es que los expertos de todo el mundo vienen avisando de los daños que pueden causar estas sustancias quimicas, cuyo impacto es una verdadera bomba retardada cuyos efectos actuaran a medio y largo plazo.
Sin embargo, y pese a todas las advertencias de los científicos, a día de hoy encontramos sin problemas muchas de estas moléculas en una enorme cantidad de productos comercializados.
Por ello es importante estar informado y tratar de evitar cualquier producto mal etiquetado y sospechoso de contener estas moléculas.
Cómo evitar la exposición a estas moléculas disruptoras del sistema endocrino.
A continuación os daremos algunos consejos para evitar estar en contacto con estas moléculas.
Lava tus manos habitualmente.
Evitar jabones con fragancias y antibacterias. Lavar siempre antes de comer
Ventila y aspira el polvo del hogar periódicamente.
Evita comprar productos perfumados.
En estos productos se esconden cientos de ingredientes potencialmente dañinos para la salud. Por ellos escoger siempre jabones y productos de limpieza sin perfume,
Piensa dos veces antes de introducir plástico en el hogar.
Muchos plásticos contienen disruptores hormonales.
Evita comida enlatada.
Muchos alimentos enlatados contiene Bisphenol (BPA), sustancia muy conocida por sus propiedades disruptoras. compra fresco y cocina tú mismo.
Consume todos los productos ecológicos que puedas.
Muchos pesticidas presentes en innumerables alimentos son sospechosos de actuar como disruptores hormonales.No uses cosméticos para niños.Los niños no necesitan cosméticos. Evítales el contacto con moléculas dañinas presentes en la mayoría de cremas y demás productos dirigidos a los más pequeños.
Limpia tu hogar de forma inteligente.
Observa la etiqueta de los productos de limpieza y elige siempre aquellos libres de tóxicos y perfumes.
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