¿Puede existir un parque de atracciones sin una montaña rusa? Claro que no, y en el novísimo parque de Harry Potter situado en Orlando no podrás encontrar una… ¡tienen dos! Eso sí, son muy especiales, así que vamos a explicar un poco sus características. Antes de nada, recuerda que puedes descargar la Guía del Parque Temático de Harry Potter en Orlando desde nuestra web.
En primer lugar aparece la Dragon Challenge, algo así como El Desafío del Dragón. Se trata de una montaña rusa que destaca por ser doble, porque cuenta con dos líneas independientes que juegan entre sí, entrelazándose en un duelo singular. Se trata de la única montaña rusa del mundo de carácter doble que cuenta con porciones invertidas, lo que conviete a la atracción en algo muy excitante. La idea básica consiste en enfrentar a dos dragones (Chinese Fireball y Hungarian Horntail.), o líneas de montaña rusa, que parten de un mismo punto y van cruzándose entre ellas, girando vertical y horizontalmente, hasta finalizar el camino en menos de tres minutos. Eso sí, serán unos segundos realmente inolvidables, en los que a velocidades máximas que rondan los 60 kilómetros por hora, ambos dragones “lucharán” entre sí. Por cierto, esta atracción ha sido renovada, pero no es completamente nueva, porque se basa en una montaña rusa ya instalada en el parque en el año 1999. El siguiente vídeo nos muestra cómo discurren las dos vías en la montaña rusa de los dragones.
La otra montaña rusa del Parque Temático de Harry Potter en Orlando es completamente diferente. Se trata de Flight of the Hippogriff, el Vuelo del Hipogrifo, una atracción que ha sido diseñada sobre un modelo anterior, conocido como el Vuelo del Unicornio. Se plantea como una alternativa más sosegada a las montañas rusas del tipo del Desafío del Dragón. Es ideal si se desea montar en una montaña rusa, pero ni se quiere pasar por inversiones ni por giros extremos. Discurre con calma, con una velocidad máxima de 45 kilómetros por hora, como si fuera un vuelo tranquilo sobre el parque, aunque también tiene su emoción. En definitiva, tenemos dos montañas rusas completamente opuestas, una pensada para los más osados, la otra ha sido ideada para la gente tranquila y, también, para disfrutar en familia con los más pequeños. El siguiente vídeo se centra en el Vuelo del Hipogrifo.