Revista Música
Cuando uno camina a la mañana temprano por la ciudad sabe con qué se va a encontrar. Hay pasos apurados, vacíos, cansados, y también hay algunos, pocos, soñadores. El otro día me crucé con Leo García a esa hora. Iba flotando con sus blancos auriculares cantando vaya a ser que Melodía Irrenunciable.