Entre los
mejores inventos de la humanidad, aparte de la rueda, la luz eléctrica, etc,
habría que incluir los mordedores para perros con sonido.
Un cachorro
se puede volver literalmente loco al jugar con uno de ellos, máxime si es de sus
primeras veces. Le puede tener totalmente absorto y entretenido durante horas.
A la novedad del juguete se une el poder utilizar su boca para algo tan natural
como la presa. Si a esto se le añade esa extraordinaria sorpresa aguda que le
activa todos sus sentidos, y que actúa como reforzador, su deseo de juego se
eleva por las nubes.
No son muy
caros y claramente marcan la diferencia con otros juguetes menos
“sofisticados”.
En todo
caso hay que atender los gustos de cada perro. A no todos les gusta lo mismo ni
en la misma intensidad.
Todo eso sin
perder de vista que tener juguetes para nuestro perro está muy bien, pero nunca
pueden sustituir nuestra compañía y dedicación.
¿Cuál es el
juguete preferido de tu perro?¿Y el que menos?