Moria en su juventud
Moria ha brillado en el cine y en las tablas, una sala del teatro Broadway de Buenos aires lleva su nombre. Vivió la época de oro del teatro de revistas y viajó en temporadas por Francia, Japón, España, Estados Unidos, Brasil y Chile. Casán es una agnóstica declarada, se casó dos veces, tiene una hija (la también actriz Sofía Gala) y dos nietos. Debutó en el teatro en 1970 con la obra "Cuando la abuelita no era hippie", en la televisión en 1971 como invitada en el programa"El mundo de Nélida Lobato" y en el cine en 1973 con el filme "Los caballeros de la cama redonda". Su rol como jurado en shows televisivos de canales como EL Trece, Telefe o América le han valido una consagración para las nuevas generaciones que han apreciado sus dotes en diversas áreas. Escuchar a Casán hablar en la televisión argentina es garantía de altas audiencias, tendencia y muchas visualizaciones en YouTube y redes sociales. Sus zascas son memorables y sus palabras son difícilmente olvidadas, ya hacen parte de la cultura argentina. De hecho Fangoria decidió escoger su frase "Momentismo absoluto" para dar título a una canción que hace parte de su EP de 2021 "Existencialismo pop" y que puede disfrutarse en todas las plataformas.
Sobre su vida se sabe que Moria creció como hija única de una familia clase media con comodidades. A los doce años, por decisión propia, impartió clases de baile para independizarse económicamente de sus padres. Desde muy niña tuvo amoríos, nunca tuvo el deseo de ser esposa, madre o casarse vestida de blanco a la típica usanza. Fue una gran estudiante con altas notas, al tiempo que era sumamente popular en su escuela. Empezó a estudiar derecho durante dos años en la Universidad de Buenos Aires. Sin embargo su pasión por las artes le llevó al teatro, su entrada a este mundo fue en sus propias palabras "avasallante" destacando en gran manera por su facilidad para actuar y bailar. Su primer matrimonio terminó por los celos enfermizos de su pareja, del cual se llegó a saber recibió golpes y malos tratos. Casán se convirtió en las primeras figuras argentinas que públicamente admitió hacerse cirugías estéticas en momentos en los que el tema era tabú.Quién se atreva a discutir con la lengua karateca sabrá que no la tiene nada fácil y que la lengua de la lengua afilada y agilidad mental no se deja menospreciar de nadie, de hecho lo usa a su favor para defenderse y situar a su oponente en una pérdida absoluta, al menos en lo que a argumentos se refiere. Casán es Casán y se ha ganado un sitial de honor que nadie puede quitarle y le ha llevado a una popularidad internacional de grandes dimensiones. A lo largo de su prominente carrera ha ganado premios como el Martín Fierro, el Paoli, el Estrella de mar y el VOS entre muchos otros.Veamos algunos de los mejores momentos de Moria que la han catapultado como la lengua karateca en nuestros días.