La Audiencia Provincial de Toledo ha archivado la investigación sobre el fallecimiento de Jeanneth Beltrán en el servicio de Urgencias del Hospital Virgen de la Salud de Toledo. Murió tras cuatro horas de espera sin ser atendida. El fiscal no ve indicios de delito. Como inmigrante carecía de tarjeta sanitaria.
Foto: Jeanneth Beltrán.
Parece increíble que esto suceda en España. Beltrán era una joven de 30 años que había venido a nuestro país para cuidar a un anciano. El día de su fallecimiento era el de su cumpleaños. Se indispuso seguramente por un daño en los riñones que, si lo hubiera seguido un médico, no hubiera tenido consecuencias fatales.
El problema es que el 1 de septiembre de 2012 entró en vigor el Real Decreto Ley 16/2012 hecho para “mejorar la calidad y seguridad de las prestaciones” del sistema sanitario. Por el mismo se niega el derecho a la atención sanitaria normalizada y pública a cientos de miles de personas en España, entre otras, a Jeanneth.
Es el mismo Real Decreto que redefine por completo nuestro modelo de sistema sanitario y que supone el repago de medicamentos y de ciertas prestaciones sanitarias.
Beltrán esperaba a “que le llegaran los papeles”, así cuenta su historia en Yo Sí Sanidad Universal, sanitarios y usuarias unidos contra el citado Real Decreto. Era lo que conoce como una “sin papeles”, una “persona ilegal” (¿vivimos una legalidad tan dura e injusta para la que no hay personas, sólo “papeles”?).
Esta organización cívica ha escrito una conmovedora carta al fiscal que no ve homicidio imprudente ni nada parecido en lo inhumano de esta muerte. En ella recuerdan que este NO es un hecho aislado sino fruto de las políticas de recortes sociales de los últimos años, los coincidentes con la crisis (esa que va por barrios pues algunas estaban de relaxing cup y otros tirando de tarjeta black mientras). Eso es lo que documenta el llamado Informe REDES, que la exclusión sanitaria es sistemática en España.
¿Sabéis lo que ocurrió tras la muerte de la nicaragüense?, que los responsables del hospital que no hizo nada por intentar salvar su vida, le mandó un aviso de cobro por los servicios “prestados”.