Moritz invierte 30 millones € en su fábrica ‘gastro’

El alsaciano Louis Moritz Trautmann llegó a Barcelona en 1851. Cinco años después creaba su fábrica de cervezas y, en 1964, inauguraba unas instalaciones en la Ronda de Sant Antoni, hoy pleno centro de la ciudad, que durante más de un siglo produjeron la gama de cervezas de esa marca que llegó a acaparar una cuarta parte de las ventas de su sector en España. Desapareció del mercado a finales de los años 70 por problemas económicos.
Sin embargo, el proyecto empresarial fue recuperado por la familia a principios del presente siglo y actualmente ya tiene un 10% del mercado catalán.
Albert Castellón, director general de la firma, recibió en 2001 el encargo de la familia de recuperar las viejas instalaciones (ocupan los sótanos, bajos y principal de tres fincas colindantes) para convertirlas en un espacio al servicio de las necesidades de la ciudad.
Castellón ha diseñado un proyecto que apuesta por “conservar el bagaje de una marca con siglo y medio de experiencia e historia” y, como él mismo señala, pretende convertirse en un referente de vanguardia en Barcelona desde el ámbito estrictamente privado.
La FMB (Fábrica Moritz Barcelona) abrirá sus puertas al público el próximo 12 de diciembre. Se trata de un espacio moderno que desarrolla un complejo proyecto que une lo gastronómico, junto a lo artístico y cultural.
Ayer se realizó una première que congregó cerca de un millar de VIP’s catalanes que pudieron conocer por primera vez la apuesta de Moritz.
El aspecto gastronómico se desarrolla en varios espacios. FMB incorpora una cervecería-tapería, una panadería, un restaurante popular y un rincón de cata de vinos.
Además, en el subterráneo se ubica una microfábrica donde se elabora una cerveza artesana que se servirá en el local. Se trata de una cerveza fresca, no pasteurizada, con un sabor más intenso, cuyo precio será de 1,30 euros.
Apuntar qu el bar vitivinícola dispondrá de una carta de 40 selecciones de vinos catalanes y blancos alsacianos (en honor al fundador) que se podrán degustar por copas. Por su parte, en el horno, regentado por la firma Triticum, de Xevi Ramón, además de pan artesano también se podrá adquirir tanto la prensa del día como una selección de revistas cool.
Cocinero estrella
El cocinero Jordi Vilà, que posee una estrella Michelin en el restaurante Alkimia, será el responsable de desarrollar toda la restauración del grupo. Ha sido fichado como director gastronómico de Moritz que posee además el restaurante Velódromo, en Muntaner con Diagonal.
La cervecería tiene diseñada una carta que combina platos catalanes y otros típicos alsacianos como el Flammkuchen y unas bravas gratinadas.
La vertiente artística se puede visualizar por todos los rincones del espacio donde se encuentran elementos ornamentales que son pequeñas piezas de arte. Además el espacio está diseñado para acoger la celebración de presentaciones, eventos, de colecciones de moda, diseño, etc.
El ámbito cultural vendrá de la mano de la creación de un museo de la cerveza en la planta noble del edificio central junto a un aula gastronómica. En él se enseñará el proceso de fabricación de este brebaje junto a la historia de la marca y del edificio centenario.
Arquitecto internacional
El arquitecto francés Jean Nouvel (el Louvre de Abu-Dhabi, la Fundación Cartier de París o la Torre Agbar de Barcelona son algunas de sus obras más conocidas) se ha encargado del proyecto de rehabilitación y diseño de este espacio, de 4.500 metros cuadrados, que se ha prolongado por espacio de una década. La inversión final destinada a FMB supera los 30 millones de euros. Este complejo empleará a un centenar de personas, un tercio del total de trabajadores que tiene Moritz.
El grupo, propiedad de los tres descendientes del fundador, Jorge, Eduardo y Daniel Roehrich Saporta, facturará este año 36 millones, un 15% más que en 2010 y está previsto que FMB aporte seis millones más de negocio anualmente al grupo.
La cerveza Moritz que utiliza la marca Barcelona como referente se fabrica de hecho en Aragón, en la factoría de La Zaragozana.