Revista Cine
Siempre voy a tener un problema con la AUTORIDAD. Es para equilibrar. Mi DEBER es rebelarme. Los Guardianes me ENCOMIENDAN el cuestionar sus métodos. Es mi TRABAJO desafiar a la gente en el poder.Con el tiempo me he dado cuenta de que casi nadie sabe lo que es un superhéroe y en que consiste su género (hablo de ello por allí y por allá pero donde más aquí). Como suele pasar con todo, la gente cree que sabe y tira palante. Hace una observación superficial sobre algo/lee algunos cómics de superhéroes y ya cree saber cómo funciona. Así la mayoría no distingue los cómics con superhéroes de los cómics de superhéroes. También piensa que cualquiera que salga en un cómic de esos es un superhéroe y no. El Castigador NO es un superhéroe. Así la cosa va como va, degenerando, en vez de progresar o mutar. Una de las cosas que impiden entender lo superheroico sólo con un vistazo es que son contradictorios. A la vez son pro y antisistema. Son gente conservadora que antepone la Ley y el Orden a cualquier cosa, pero a la vez no siguen las leyes y alteran el orden constantemente. Por eso muchos guionistas al no entender que esa tensión es una de las premisas del género los simplifican. Así unos les hacen servir al gobierno (normalmente cuando el presidente de EEUU es popular), con lo que dejan de ser superhéroes, y otros los convierten en justicieros o, como los llaman los estadounidenses: vigilantes (un superhéroe no es jurado, juez y verdugo y sólo actúa contra culpables manifiestos, un superhéroe jamás ha apalizado al tipo equivocado, salvo si este era superhéroe), con lo que también dejan de ser superhéroes. Morrison sabe desto un huevo y por eso define al superhéroe certeramente en el nº 3 de la miniserie The Green Lantern: Black Stars. Lo hace con un personaje contradictorio pues un linterna verde no es un superhéroe, es un policía. De eso es consciente Morrison, pero es que su Hal Jordan es el típico poli indisciplinado de las pelis policíacas de los 70 y 80. Un hijo descafeinado de Harry Callahan y Martin Riggs. O sea, Hal Jordan es un poli pero no tiene la mentalidad sumisa y disciplinada típica de uno. Por eso Morrison puede definir a un superhéroe usándole. Este hace parte del trabajo de un poli porque tiene la mentalidad de uno, pero a la vez, y aunque es paradójico, se folla la Ley y el Orden cada vez que se disfraza. Porque no existen los uniformes de superhéroe. Lo que hay son disfraces, y eso es otra cosa que hay que saber y comprender para escribir superhéroes bien o correctamente (que no quiere decir que con eso salgan historias buenas o entretenidas). Así, el superhéroe está muy cercano a un activista o, como se les conoce ahora: woke o SJW. El superhéroe es un conservador porque no piensa que haya una injusticia social lo suficientemente grave para merecer sus esfuerzos y sueña con un lugar de Ley y Orden (otra cosa contradictoria suya es que es un burgués aristócrata), pero es crítico con el gobierno de turno y no piensa que las leyes están para cumplirlas. Un superhéroe en una ciudad o en un Estado significa que la gente en el poder no está siendo autoritaria. Que los criminales están crecidos o son más poderosos quellos. Es decir, un superhéroe critica con su presencia y actividad la política de seguridad de los gobernantes de un lugar. Un superhéroe por ego o por trauma piensa que las cosas se están haciendo mal o sin recursos suficientes y por eso se lanza a hacerlo él. Mitad para arrimar el hombro o contribuir, mitad para criticar la paja en el ojo ajeno. Así, los superhéroes, más que intentar aumentar la seguridad de las personas ordinarias, critican a la gente en el poder. Batman es la mayor oposición al alcalde de turno de Gotham. Los superhéroes urbanos de Marvel son lo mismo para el alcalde de turno de NY. Iron Man denuncia que el gobierno de EEUU no gasta lo suficiente en Defensa. Superman critica que las superpotencias pasen de la gente. Wonder Woman critica la inclinación a la violencia y la mentira de los políticos. Etc. Todos creen en la democracia de masas y el capitalismo de consumo pero también todos creen quese sistema tiene fallos. Lo difícil es saber si creen que el nivel de población y consumo es insuficiente o que se necesita un sistema policial. Lo questá claro es que si los guionistas de Batman fuesen coherentes ahora mismo Gotham estaría lleno de batcámaras, batdrones y batbots y por tanto llena de chinos comunistas y demás gente que le gusta estar controlado por una figura patriarcal. Y es que apoyando ciegamente la Ley y el Orden es somo sempedra el Infierno. Por eso los superhéroes nunca deben dejar de ser oposición. Especialmente si llevan máscara porque entonces son protosupervillanos. Batman lleva una para dar miedo, el deseo de cualquier supervillano. Spiderman lleva una por miedo pero así lo que consigue es que algunos le puedan acusar de supervillano. Y Thanos no lleva máscara porque su cara le sirve de tal.