Definición y propiedades
El carbón activado es un ingrediente de origen vegetal. Su procedencia viene principalmente de maderas como el bambú o el coco. Se obtiene a partir de la combustión a temperaturas muy altas (400-700 grados) de materiales orgánicos que contienen mucho carbono y pocas cenizas, con mucha concentración de oxígeno. El resultado de este complejo proceso es un material microporoso (polvo muy fino), negro e inoloro que se caracteriza por tener las siguientes propiedades:
- Absorción altísima y gran porosidad. Esto lo convierte en un ingrediente perfecto para eliminar impurezas y toxinas.
- Es ligeramente abrasivo, aunque a la vez es suave para ser utilizado en la piel
- Es antibacteriano y desintoxicante
Estas propiedades hacen que sea un material purificante y al ser tan absorbente se une a las moléculas, iones o átomos, eliminando las sustancias disueltas. En caso de ser ingerido, el polvo negro impide que las toxinas se absorban por el estómago al adherirse a ellas. Nuestro cuerpo no puede absorber el carbón. Por este motivo las toxinas que se unen al carbón son eliminadas por medio de las heces.
En el proceso de activación, el carbón disminuye el tamaño de sus poros, produciendo más espacios en cada molécula. Además de aumentar su superficie.
Beneficios para nuestra piel
- El carbón activado limpia y exfolia. Además de absorber impurezas, toxinas y restos de suciedad. Gracias a ser desintoxicante nos permite controlar la contaminación de la piel. Este factor favorece la aparición de los radicales libres que envejecen la piel.
- Absorben el exceso de grasa de la piel y consigue equilibrar la producción sebácea.
- Al eliminar la suciedad, aporta brillo, tono y textura de nuestro cutis. Es decir le da a nuestra cara una apariencia más saludable.
- Combate el acné y evita su aparición, debido a sus propiedades antibacterianas.
- Reduce el tamaño de los poros, ya que elimina la suciedad que los obstruye.
Utilización del carbón activado
El carbón activado se utiliza como ingrediente en mascarillas de diferentes tipos. Además está presente en otros cosméticos como exfoliantes, cremas para la cara, tiras para eliminar los clásicos puntos negros de la nariz. También en jabones faciales, lociones para la cara y esponjas.
Usar el carbón activado en nuestra piel es altamente seguro. Aunque nuestra recomendación es siempre acudir a sitios donde los productos ofertados sean de calidad contrastada.
El carbón activo tiene diferentes usos medicinales y cosméticos, debido a sus propiedades de absorción de toxinas. Una de las utilizaciones más importantes es el tratamiento de emergencias producidas por sobredosis o envenenamientos. En el mercado se pueden encontrar diferentes y variados productos basados en los principios químicos del carbón activado:
- Filtración de aire y purificación del agua. Los filtros de carbón son utilizados para la purificación del aire, agua y también gases. Sirven para quitar o reducir vapores de aceite, sabores y olores.
- Blanqueamiento dental y salud bucal. Muchos productos de higiene dental como pastas dentífricas o hilos dentales contienen carbón activado. El motivo son sus propiedades antivirales, antibacterianas y desintoxicantes.
- Cuidado de la piel. El carbón activado ayuda a la eliminación de micropartículas como el polvo, tierra, químicos, toxinas y bacterias que están en la superficie de nuestra piel.
- Desodorantes. El carbón es un ingrediente vegetal ideal para los desodorantes de axilas y pies. El motivo es su capacidad de absorción de olores y de exceso de humedad.
- Protector intestinal. El carbón activado es ideal para el tratamiento de la diarrea, los gases, el malestar intestinal y el reflujo biliar. Esto es debido a que el carbón impide que nuestro cuerpo absorba las bacterias y medicamentos con efectos secundarios para nuestro estómago, ya que los atrapa en su superficie porosa.
Esperamos que el artículo haya sido de vuestro interés.