Gracias a la campaña En Tierra de Nadie me animé a pintar este proyecto que tenía pendiente desde hacía años (la caja de inicio de 6ª la acabé comprando sólo, los caóticos tenían un destino claro, pero ¿y los ángeles oscuros? los exterminadores acabaron convertidos en Caballeros Grises y las motos estuvieron mucho tiempo esperando en mi caja de restos, rodeadas de piezas sobrantes del caos y de los demonios de Nurgle), la “Vulturewing”, en honor al origen de las miniaturas.
Nunca he hecho mucho caso a las motos del caos, quizás porque no son muy comunes según el trasfondo de la Guardia de la Muerte, pero bueno, una vez ya consigues todos los marines espaciales a pie que necesitas empiezas a echarle un ojo al resto de slots de tu ejercito ¡que algún motorista de Nurgle habrá! (muchos en realidad, como demuestran los jugadores de torneos).
El campeón de la escuadra, con extra de pinchos para trofeos y usando la cabeza de un portador de plaga.
También usé un trofeo de la caja de corruptores del apocalipsis de Avatars of War.
Las cabezas de los otros dos motoristas provienen también de los corruptores de Avatars of War.
Los motoristas armados con rifles de fusión tienen el puño imantado, por si caso se me pasa por la cabeza probar otras armas especiales (de hecho en Kill Team los he estado utilizando sin ningún equipo adicional hasta hace poco).
En fin, estas miniaturas son las primeras víctimas de mi nuevo esquema de pintura para la Guardia de la Muerte, el anterior siempre me había parecido muy limpio, y tras preguntar en el grupo de juego con el que me reúno me aconsejaron: “Lavados como si no hubiera un mañana”. No me convencía mucho la idea (vengo de ahí y empecé a pintar mis eldars con un esquema mucho más limpio gracias a salir de ese estilo), pero desde luego que con un perfilado posterior, que resalte el detalle y muestre que no soy un pintor tan vaguete, quedan mucho mejor.
¡Saludos y seguid pintando!