Movie Review…por César del Campo de Acuña
Dirección: Michael Dougherty.
País: Estados Unidos.
Año: 2007.
Duración: 78 minutos.
Género: Terror. Thriller. Comedia. Drama
Guion: Michael Dougherty.
Intérpretes: Quinn Lord, Brian Cox, Dylan Baker, Leslie Bibb, Rochelle Aytes, Anna Paquin, Moneca Delain, Tahmoh Penikett y Lauren Lee Smith.
Música: Douglas Pipes.
Fotografía: Glen MacPherson.
Montaje: Robert Ivison.
Dirección artística: Fabian Jonathan y Tony Wohlgemuth.
Diseño de producción: Mark Freeborn.
Estreno en Estados Unidos: 9 de diciembre de 2007.
Estreno en España: 7 de octubre de 2008.
If you don’t follow the rules tonight, you won’t live to see tomorrow
Lo he escrito en incontables ocasiones. Me encantan las antologías de terror. Ya sean en formato cómic (como por ejemplo la que comente de Junji Ito o la de Bernie Wrightson) o cinematográfico (¿alguien ha dicho Creepshow?). Personalmente creo que al género le sienta francamente bien la historia corta con altas dosis de humor negro en forma de lección o moraleja grotesca. Disfruto mucho de este formato y cada vez que llega a mis oídos el lanzamiento de un proyecto de este tipo no dudo en hacerme con él. Recientemente pude ver Cuentos de Halloween y disfrute como un niño. No hace falta decir que la edición en Blu-Ray de este film ya ocupa un lugar en mis estantes. El caso es que la cinta de cortos de 2015 iba a ser la protagonista de la sección cinematográfica de la edición 2016 del Especial Halloween, pero no quería revisitarla tan pronto y así, devanándome los sesos, me acorde de Truco o trato: Terror en Halloween, una antología de la que solo había escuchado excelentes palabras y que llevaba tiempo querido ver. La busque. La encontré. La vi. Y esta es mi opinión.
Truco o Trato se sale del formato episódico que hasta la fecha conocía en las antologías cinematográficas de terror como la citada Creepshow, Relatos salvajes o En los límites de la realidad. En su lugar Michael Dougherty, en su primer largometraje, opta por presentar 5 historias cortas unidas entre sí de diferentes maneras. La más evidente es la presencia de Sam, un niño con un disfraz de muñeco realmente siniestro, en todas y cada una de ellas pero la relación no termina ahí. En buena parte de las escenas de los diferentes relatos se puede ver de manera indirecta a los protagonistas/personajes de las otras historias que conforman esta producción. Por si fuera poco la originalidad de su planteamiento, Doughterty imprime un ritmo trepidante a la acción y no deja que el espectador se aburra con ninguno de los cuentos macabros que el mismo ideo (a fin de cuentas es también el guionista). Creo que cualquier aficionado al fantástico estará de acuerdo con que en este tipo de producciones suele haber “capítulos” que flojean enormemente y en Truco o trato: terror en Halloween, si bien es cierto que hay algunas por las que tanto los espectadores como la narración pasa de puntillas, ninguna termina de estar solo por rellenar un determinado número de minutos de metraje.
Esa es otra. Lo poco gusta y lo mucho cansa. 78 minutos de metraje. Qué maravilla sentarte a ver una película sin notar la sensación de que te estas metiendo en una excursión de dos horas. Dougherty, fogueado principalmente en el guion, sabe que tiene que hacer y lo hace bien. Contenta al espectador del terror con efectos especiales prácticos y buenas historias y al espectador casual con unos cuentos sumamente entretenidos y no demasiado largos en los que, curiosamente, no están poblados por personajes anodinos o poco interesantes. Todos importan, todos tienen su lugar en las macabras historias pergeñadas por Dougherty en las que no solo divierte, también horroriza, algo que muchas antologías de terror parecen olvidar que tienen que hacer al centrarse demasiado en el humor negro de la moraleja sangrienta que en crear un relato que te hiele la sangre durante la película y después de que pasen los títulos de crédito.
Truco o trato: Terror en Halloween es una delicia sumamente refrescante en la que se reúnen asesinos en serie, zombis y mujeres lobo en cinco pequeños cuentos de terror que encantaran a cualquier aficionado al cine fantástico. Michael Dougherty convence con su primer film y demuestra que se puede hacer buen cine de terror divertido sin caer en la patochada. No se pierdan Krampus: Maldita Navidad, filmada por el mismo y que es otra maravilla del subgénero cine de terror festivo como Truco o trato: Terror en Halloween. Si no la han visto, como les suelo decir casi siempre queridos lectores, ya están tardando. Por derecho propio este pequeño film es uno de los mejores ejemplos del fantástico del presente siglo y merece mucho más amor del que recibe.
Curiosidades:
- La mayor parte de las Jack O’ Lantern vistas en la película son de foam o cerámica. Durante el rodaje, en el set, se hacía continuamente el chiste “ninguna calabaza resulto herida durante la filmación de esta película”.
- El aspecto del personaje de Brian Cox está inspirado/basado en looks extraídos de La noche de Halloween y La cosa (El enigma del otro mundo) de John Carpenter.
- La película está basada en el corto de animación de 1996 Season’s Greetings dirigido por Michael Dougherty. Sam apareció por primera vez en el citado corto.
- Ernst Harth, actor que interpreto al bebe gigante de 13 Fantasmas, aparece disfrazado como un bebe gigante. Evidentemente no se trata de una casualidad, sino de un guiño a Warner Borthers, al tratarse ambas de películas lanzadas por el estudio.
- Antes de completar el rodaje la cinta tuvo varios nombres como Season’s Greetings, Halloween Terrors, Jack O’ Lantern Tales, October the 31st y Trick or Treat. Finalmente fue bautizada como Trick ‘r Treat.
- La chocolatina que salva la vida del personaje de Brian Cox en la climática pelea final se llama LHOTKA. El nombre es el apellido del coproductor del film Peter Lhotka.
- En un principio la cantera abandonada iba a ser un campo de calabazas.
- La botella que el personaje de Brian Cox rompe para defenderse de Sam se llama Glen MacPherson exactamente igual que el director de fotografía.
- El nombre del personaje Sam deriva de Samhain, el antiguo festival celta dedicado a los muertos y que hoy en día conocemos como Halloween.
- La mayor parte de los niños disfrazados que vemos en la película son en realidad enanos (gente pequeña para los amigos de la corrección política) ya que los niños no pueden trabajar a las horas en las que se solía rodar.
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Archivado en: Cine, Especiales, Halloween, Movie Review