Texto originalMóviles y pediatras
Sr. Director:
la ministra de Juventud ha llevado al Gobierno a decidir que el uso de telefonos móviles por los menores van a controlarlo los pediatras.
Aparte de la muy probable invasión de competencias en materia de salud trasferidas a las Comunidades Autónomas, es una flagrante ingerencia en la práctica profesional de un colectivo: los pediatras, bastante dejado de la mano de Dios.
Seguro que todo el mundo entiende que, en su origen, la adición a las pantallas de móviles, ordenadores o televisión, es esencialmente una materia social.
En el estado hay unos 9000 pediatras, de los que 96 se identifican a ellos mismos como pediatras sociales, encuadrados en la Sociedad Española de Pediatria social.
Los pediatras conocen los efectos adictivos de la tecnología electrónica, videojuegos, televisión, Internet o redes sociales. Y ya hacen lo que pueden que, ocasionalmente, pueda ser referir un paciente a los servicios de Salud Mental, como de cualquier otro trastorno psicoemocional.
El problema es la adicción. Pretender que prohibiendo los telefonos móviles se resuelva un problema complejo es un simpleza. La persona, menor o adulta, con tendencias adictivas, encontrará otro medio, modo o diseño que satisfaga su neurosis.
Como todos los problemas sociales, tiene que tener una solución social que, naturalmente, implica a toda la sociedad.
Xavier Allué, pediatra y antropólogo
(Enviado el 6 de junio, publicado el 23 de junio. En negrita la parte del texto eliminada por LVG)
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