El cantante de jazz estadounidense Jimmy Scott ha fallecido este fin de semana en Las Vegas a los 88 víctima de un paro cardíaco. Se trata de uno de esos artistas de culto admirados por los colegas de profesión, pero al que el éxito comercial le fue dramáticamente esquivo.
Entre los artistas que profesaron su admiración por Scott (cuyas hormonas no se desarrollaron convenientemente en la adolescencia, generando una voz de lo más peculiar) se encuentran Lou Reed (cantó en su disco 'Magic and Loss' de 1992), Ray Charles, Quincy Jones o David Byrne. Incluso Axl Rose le incluyó hace apenas unos días en una lista con sus cantantes preferidos.
A pesar de que inició su trayectoria a finales de los cuarenta, nunca gozó realmente de una carrera continuada que le permitiera vivir de la música. Tras cantar en el funeral de un amigo en 1991, un ejecutivo de Sire Records le fichó y pudo publicar el disco 'All the Way', que terminó siendo nominado a un Grammy.
Tal y como leemos en Rolling Stone, otro de los puntos culminantes de su carrera fue su aparición en el último capítulo de la serie de televisión 'Twin Peaks' de David Lynch, cantanto la canción 'Sycamore Trees'. Descanse en paz.