Devoré Asesinato en Amsterdam, de Ian Bruma. Un magnífico ensayo que, con la excusa de tratar el asesinato de Theo Van Gogh, aborda la la integración -y la no integración- de los inmigrantes musulmanes en la Europa cristiana. El rol del padre, ausente o vencido, es mucho más importante de lo que parece y de lo que se cuenta para muchos de estos adolescentes que se vuelcan en una religión que no comprenden pero que les otorga sentido de pertenencia.
De fondo, el cambio en un país acostumbrado a la sátira y a la crítica religiosa y que ahora ha de afrontar extremismos sin fin por parte de comunidades que no quieren integrarse...
Un lectura necesaria