Mujeres dignificantes: hypatia/hipatia de alejandría

Esta es mi primera entrada de “mujeres dignificantes de otras mujeres” y he decidido empezar con una de las féminas más maravillosas que ha parido el planeta tierra. Ella es nada más y nada menos, que la gran y excelentísima Hypatia/Hipatia de Alejandría.
Aunque era natural de Egipto, podemos decir que fue una gran filósofa y maestra neoplatónica Griega. Fue una mujer que peleó en un mundo de hombres y que aunque esto, le costó su vida, también la llevó a la dignidad más excelsa que puede haber en el ser humano: “Nunca nadie logró hacerla arrodillarse por nada”. Fue miembro y líder además de la escuela Neoplatónica de Alejandría a comienzos del siglo V. Seguidora de las enseñanzas de Plotino, Hypatia de Alejandría, cultivó los estudios lógicos y las ciencias exactas, algo que determinó en gran medida su incredulidad ante la religión. Educó a la escuela de aristócratas cristianos y paganos que ocupaban altos cargos políticos, entre sus alumnos podemos nombrar a: Sinesio de Cirene, Hesiquio de Alejandría y el prefecto de Egipto de entonces; Orestes.
Su padre fue el gran astrónomo Teón. De él aprendió a buscar más allá de donde veían sus ojos y gracias a él, logró en cierta medida mucha de su independencia, algo que para la época, era impensable en una mujer. Fue la primera mujer matemática de quien tenemos algún tipo de conocimiento fiable. Se ocupó de la geometría, álgebra y astronomía, mejoró el diseño de los primeros astrolabios y fue la inventora del hidrómetro.
Aunque no se tiene fecha exacta de su muerte, como tampoco se tiene de su nacimiento, se calcula que vivió más de cuarenta años y la causa de su muerte, fue un linchamiento promovido y ejecutado por los cristianos de entonces. Fue una de las muchas victimas de la hostilidad con que arremetían los cristianos primitivos contra lo que ellos consideraban paganos. Cabe destacar que para el momento de su muerte, la iglesia estaba regida por el patriarca Cirilo, de quien es ampliamente conocido su carácter hostil, machista y retrogrado, Hypatia de Alejandría era considerada “peligrosa” porque tenía una manera poco común de ver el mundo y porque era además muy estimada por el prefecto. Cirilo, no podía permitir que ella tuviese acceso al poder siendo mujer y no podía permitir tampoco que Orestes tuviese algún tipo de influencia de una mujer- entonces las mujeres eramos consideradas animales de apareamiento con una única función reproductora- Se presume, aunque no se tiene certeza, que la orden fue dictada por este ministro de la iglesia y ejecutada por los fanáticos religiosos de entonces. Lo cierto es que esta mujer fue sentenciada sin juicio, despojada de su derecho a la vida, mancillada, insultada y dilapidada por una horda de asesinos que llamándose “hijos de Dios” cometieron una de las muchas atrocidades que se cometen cuando la iglesia es comandada por seres sin corazón.
Hypatia nos dejó un gran legado científico y aunque ha sido considerada “pagana” por algunas autoridades de la religión católica, no hay certeza de eso, puesto que como afirmaba ella misma: “sólo creía en la filosofía, en aquello que su cabeza podía probar”, descartando de antemano cualquier nexo con Dioses paganos o católicos. Su figura ha sido considerada un mito. Desde la época de la ilustración se le ha considerado una “mártir de la ciencia” y en los movimientos feministas, se le considera un símbolo de libertad y la lucha por la independencia de la mujer.