«¿No basta, Señor, que nos tiene el mundo acorraladas e incapaces para que no hagamos cosa que valga nada por vos en público…? No lo creo yo, Señor, de vuestra bondad y justicia, que sois justo juez, y no como los jueces del mundo, que como son hijos de Adán, y en fin, todos varones, no hay virtud de mujer que no tengan por sospechosa» (CE 4, 1). Estas conocidas palabras de Teresa de Jesús que el censor creyó eliminar para siempre emborronando el primer manuscrito de Camino de Perfección vienen a mi mente al conocer la noticia que vamos a comentar hoy.
Teresa de Jesús nació hace ya más de cinco siglos, y es tiempo de que haya cambios significativos en la Iglesia, en la sociedad. De entrada, el papa Francisco los está alentando, al crear una comisión que estudia el papel del diaconado femenino en la historia de la Iglesia, con vistas a la posible ordenación de mujeres como diaconisas.
La revista católica América ha publicado estos días un artículo en el que se hacen eco del nacimiento de una nueva página web dedicada a la predicación de las mujeres católicas. Se estrena el día 1 de noviembre.
Una de las preguntas más curiosas que lanzó el papa Francisco a comienzos de este año –cuando anunció que una comisión del Vaticano estudiaría si la iglesia primitiva tuvo diaconisas– era: ¿Cómo reaccionarán los católicos ante la predicación de una mujer? Algunas mujeres católicas confían encontrar pronto la respuesta.
Una nueva página web llamada “La predicación de lass mujeres católicas” (Catholic Women Preach) publicará videos para mostrar precisamente esto, a mujeres católicas que predican. Las reflexiones serán a propósito de las lecturas semanales de la Iglesia. Las mujeres que apoyan el proyecto dicen que esperan que los videos ayuden a los católicos a profundizar en su fe y a sentirse más cómodos con la idea de que las mujeres prediquen.”Las mujeres predican sobre cosas cualitativaemnte diferentes y nos tocan de manera distinta a otros temas que no nos afectan”–sostiene Deborah Rose-Milavec, directora ejecutiva de Future Church y una de las fundadores de Catholic Women Preach.
“Incluso si es una experiencia un poco extraña para la gente–continuó– una vez que comiencen a escuchar con atención la sabiduría y las palabras de estas mujeres católicas que predican, ello les tocará también de forma totalmente nueva.”
La ley de la Iglesia permite predicar a los laicos, incluidas las mujeres, solo en circunstancias extraordinarias, cuando un ministro ordenado no está disponible.
Pero aunque las mujeres lleguen algún día a ser ordenadas como diaconisas, no hay ninguna garantía de que se les permitiera predicar, al menos no en la forma en que los católicos están acostumbrados hoy en día. En comentarios emitidos a principios de este año, el Papa sugirió que los sacerdotes, que actúan in persona Christi, durante la misa, son los que deben pronunciar la homilía. Pero no habría “ningún problema”, dijo, para que las mujeres predicaran reflexiones bíblicas en otros contextos, tales como liturgias de oración.