Fue uno de los referentes de la literatura latinoamericana y murió ayer, a los 83 años de edad. Premio Planeta en 2003 por el 'Baile de la Victoria' es conocido por el gran público por las adaptaciones cinematográficas de sus obras, y en particular por la película 'Il Postino' o 'El cartero de Neruda'.
Skármeta ha sido traducido a más de treinta idiomas, embajador en Alemania y presentador de televisión. El presidente chileno, Gabriel Boric dijo de él: “Gracias, maestro por la vida vivida. Por los cuentos, las novelas y el teatro. Por el compromiso político. Por el show de los libros que amplió las fronteras de la literatura. Por soñar que la nieve ardía en el Chile que te dolió tanto”.
Perteneciente a la generación de escritores de los 60, Skármeta (Antofagasta, 1940) es, junto al de Gabriela Mistral, Pablo Neruda e Isabel Allende, uno de los más reconocidos de las letras chilenas, con tres de sus libros trasladados a la gran pantalla: 'Ardiente paciencia' (en el cine conocida como 'El cartero de Neruda'); 'El baile de la Victoria', premio Planeta 2003; y 'El plebiscito'.
Descendientes de croatas, tenía 33 años cuando llegó el Golpe de Estado que acabó con el gobierno democrático y progresista del socialista Salvador Allende. El joven escritor, militante de izquierda vinculado al Movimiento de Acción Popular y Unitaria (MAPU), de arraigo estudiantil y campesino, salió al exilio primero a Argentina y luego a Alemania, donde se radicó. En Berlín, desarrolló su pasión por el séptimo arte, ejerció como profesor en la Academia Alemana de Cine y Televisión, fue director de dos películas, actor en varias cintas y escritor de decenas de guiones.
Tras el retorno a la democracia y bajo el gobierno del socialista Ricardo Lagos (2000-2006), el escritor llegó a ser embajador en Alemania.Nunca tuvo reparo en mostrar sus ideas, como en su primera novela 'Soñé que la nieve ardía' (1975), en la que elogia el Chile socialista de Salvador Allende (1970-1973) o 'Insurrección' (1982), y trató la revolución sandinista en Nicaragua. Entre sus numerosos galardones, destaca también el Premio Planeta por 'El Baile de la Victoria', llevada en 2009 al cine y tuvo una gran pasión por el director español, Fernando Trueba. Pero fue un “cartero” quien le llevó a los altares de la literatura latinoamericana y de la fama mundial.