Revista Cultura y Ocio
Muse, la banda británica, editó en 2001 Origin of Symmetry, tras una larga gira mundial de su primer disco Showbiz. La mayor parte de los temas del álbum habían sido tocados ya en directo, y el grupo quería mantener ese sonido en vivo. Mientras en el primer álbum el sonido de la banda era bastante complejo, con instrumentos diferentes y superpuestos, en este otro trabajo su objetivo era sonar como un trío realmente poderoso, y a fe que lo consiguieron. Hasta a Matthew Bellamy le crearon una guitarra especial, llena de efectos integrados. Era además una época, en el que el estilo del grupo, con un ramalazo punk bestial y su estilo futurista tanto en los vídeos como en las ropas, llamaba la atención. La primera vez que los vi en directo en el FIB 2002, me dejaron impresionado por su potencia y su despliegue, sin duda uno de mis descubrimientos gloriosos para la historia de aquel festival (en el que tuve muchos con aquel cartelazo).
El tema que os pongo es Bliss, que fue single del disco, con esos teclados del principio (cuña para muchas publicidades) y esa entrada cañera de la guitarra con su estribillo precioso. El vídeo no pasa desapercibido, con ese vuelo de Matthew por ese tremendo agujero, que se asemeja a uno de mis sueños de siempre, donde no paro de caer desde mucha altura.