Revista Cultura y Ocio
No hace mucho Pierre Mollier hablaba para un compañero de otro blog y, con su colaboración, reproducíamos en Memoria Masónica sus palabras y traducíamos la entrevista completa. Fue durante el transcurso del último Salón del Libro Masónico de la capital francesa. Pierre Mollier, a la cabeza del Museo de la Francmasonería, comentaba los importantes logros obtenidos en un corto espacio de tiempo, pero también la dificultad que representaba mostrar visualmente a la sociedad qué papel e influencia habían tenido los francmasones en nuestra historia más reciente. Hacer tangibles esos contenidos resultaba complicado pero adelantaba que se pensaba acometer una reforma del espacio museístico consagrado a los siglos XIX y XX.
La reforma y mejora de las instalaciones ya ha sido acometida y se inaugura mañana a las seis de la tarde. Lástima que París nos quede un poco lejos, aunque lo importante es el trabajo realizado y saber que éste está ahí a disposición de todos.
Los amigos del propio Museo me han proporcionado algo de información que creo será útil a quien de momento quiera hacerse una idea de qué es lo que ha cambiado en rue Cadet:
Concretamente se han remodelado las secciones dedicadas a los siglos XIX, XX y XXI. Así, se ha añadido una seccion consagrada expresamente al episodio de la Comuna de París, en 1871; se ha incorporado también una referencia visual a la Francmasonería mixta y femenina, ilustrando al visitante sobre determinadas estructuras masónicas como la Gran Logia Simbólica Escocesa, el Derecho Humano o la Gran Logia Femenina de Francia, o sobre personalidades como la de Maria Deraisme que hicieron una aportación fundamental en este dominio.
No puede faltar la referencia "franco-francesa", que diría un buen amigo de Bayona: Se evoca ahora la presencia de la masonería en lo que fueron dominios coloniales del país vecino, incluída la Indochina, y con una especial mención a Abd El-Kader.
Alguien que desde el cálido Sur pilota el Blog Apuntes del Rito Francés, hablaba no hace mucho -y muy bien, por cierto- de la escultura de la Mariana masónica realizada por Jacques France. Es la obra que preside todos los Conventos y que forma parte de la decoración permanente del Templo Arthur Groussier. Pues bien, se ha ampliado la sección dedicada a esta hermosa pieza, incorporando nueva documentación que se añade a la exhibición del molde, de la medalla realizada en su momento, de los grabados y otros manuscritos.
La nueva presentación permite dirigir la mirada hacia determinados pasos dadosque constituyen a día de hoy un anhelo para muchos francmasones y francmasonas del mundo entero: Es el caso, por ejemplo, del proceso que condujo a la separación de las iglesias y el Estado.
Se ha reducido el espacio que se dedicaba a la Segunda Guerra Mundial y a la represión de la Francmasonería. A cambio se ha ampliado el contenido orientado a mostrar al visitante las relaciones existentes entre Francmasonería y la cultura, exponiéndose en la actualidad la obra de diferentes autores en dominios muy diversos: comic -lo ya conocido de Hugo Pratt, con la exhibición de una plancha original de Fort Wheeling, su mandil de maestro y el acta de paso al cuarto grado- o pintura surrealista - con la presencia de obras de Paul Dermée o del español Juan Gris-.
Hay una sección contemporánea presidida por un conocido cuadro que, si no me equivoco, puede verse en la página web del propio Museo, y que representa una tenida celebrada en el Templo Arthur Groussier por el Gran Oriente Latino Americano. Bajo esa pintura el visitante va a poder acercarse y tener una idea de cuál es la decoración masónica que portamos hoy en las logias, con exhibición de guantes, mandiles de aprendiz, así como de maestro pertenecientes a cuatro sistemas diferentes: El del Rito francés, el del Escocés Antiguo y Aceptado, el del Rectificado y el de Memphis-Mizraim.
El visitante podrá también hacerse una idea bastante exacta de cuáles son los mecanismos de exteriorización de los que se vale la Francmasonería en la actualidad: Publicaciones del Gran Oriente de Francia, de Derecho Humano, de la Gran Logia de Francia; cuestiones sometidas al estudio de las logias y editadas posteriormente -se conserva y exhibe un ejemplar de 1929-; y portadas de otras revistas centradas en la materia que nos ocupa.
He expuesto tan solo una pincelada. Creo que es suficiente porque, estaremos todos de acuerdo, determinadas cosas hay que verlas y vivirlas. En cualquier caso quiero dar desde aquí las gracias al Museo de la Francmasonería y a su Sociedad de Amigos por haberme facilitado la información que me ha permitido redactar esta nota.Et si omnes, ego non.