El Museo fue creado el 24 de Marzo de 1967 por la Junta de Estudios Históricos de Mendoza, ya que fueron sus miembros quienes decidieron que era necesario tener un espacio donde ubicar los cientos de objetos, muebles, obras de arte, libros y otros tantos objetos donados por un sinfín de personas que los guardaban en sus hogares como piezas privadas que pasaban de generación en generación como bienes de herencia.
Así es como en ese año pudieron reconstruír la antigua casa en la que antaño vivió el ex gobernador Emilio Civit, todo un personaje en la historia de Cuyo, quien no solo gobernó la provincia como antes lo había hecho su padre, sino que además de ser Ministro de Obras Públicas del gobierno de J. A. Roca, tuvo una participación activa en el diseño de buena parte del casco histórico tal cual como se lo ve en la actualidad.
Hasta entonces la casa había estado en un estado lamentable (debido a que al ser de construcción colonial estaba hecha con materiales como barro, paja y pisos flotantes de madera que acabaron desgastándose por los sismos repetidos en la zona) y por ello fue necesario un arduo trabajo de reconstrucción y restauración de algunas de las habitaciones que hoy ofician de salas.
Sobre como recorrer el Museo
En total el museo cuenta con 15 salas y una interesante y completa biblioteca donde se guardan cerca de 7000 ejemplares originales editados en los últimos 200 años de historia. El criterio organizativo del museo fue el de utilizar las antiguas habitaciones de la casona y en cada una de ellas ubicar objetos, mobiliarios y piezas de arte según una temática específica.
Aquí les dejo el recorrido recomendado para que puedan disfrutarlo siguiendo un orden cronológico, el cual les permitirá tener una idea clara y ordenada de aquello que van a ver:
Sala Religiosa: es la primera sala que se puede ver en el interior del museo y cuenta con varias piezas religiosas traídas de España algunas y otras confeccionadas en nuestro país. La sala fue ambientada como una verdadera capilla, ya que en ella se encuentran bancos de iglesia del siglo XVIII, esculturas de Cristos, Vírgenes y hasta un retablo barroco del siglo XV aparentemente de España.
Allí mismo se encuentra una pila de túnicas sacerdotales con pasamanerías de la época y los dos objetos que más acaparan la atención del visitante son: una Virgen del Alto Perú que tiene cabello natural (seguramente ofrendado por alguna fiel, típica costumbre de ciertos países andinos) y la imagen de un Sagrado Corazón pintado sobre cartón y sobre el cual se hizo un trabajo de bordado y collage realmente interesante.
Sala Cuyana y de Armas: guarda una colección de muebles de algunos pobladores conocidos (mesas, sillas, vajillas y otros utensilios de la vida cotidiana en la época colonial) y también una colección de fotografías que atestiguan el cambio fisonómico de la ciudad. A un costado, una pequeña habitación exhibe algunas armas que pertenecieron a las familias de más rancio abolengo de la sociedad mendocina.
Sala de Unitarios y Federales: en esta pueden verse cuadros y litografías relacionadas con la puja entre Unitarios y Federales, una de las primeras de nuestra historia nacional. Así es como entre muebles, murales gigantes y cuadros más pequeños (entre los que sobresalen el del Fusilamiento de Dorrego) tras el vidrio de un pequeño portarretratos puede verse una divisa punzó original, con el nombre de quien la portó entonces.
Sala de Pancho Fierro y Numismática: espacio dedicado a un buen número de monedas muy bien catalogadas y exhibidas en unos muebles creados especialmente para tal fin. Como agregado al pequeño espacio (al cual es aconsejable entrar de a no más de dos personas, ya que es un pasillo largo y muy angosto) puede verse una colección de grabados en tamaño de postal, pintados por diferentes artistas y que dejan al descubierto los personajes de la sociedad de entonces (el juez, el aguatero, el velero, el policía, la mazamorrera, etc.)
Sala Hispánica: en esta sala se encuentran algunos objetos que fueron traídos por mendocinos que viajaban a la madre patria. De esa forma aparecen abanicos, pinturas, espejos, diarios de viaje y objetos de cosmética, seguramente utilizado por las damas que acompañaban a sus maridos durante las travesías en barco.
Sala de los gobernadores Francisco y Emilio Civit: esta sala – junto con la que guarda los objetos relacionados a la figura de San Martín- es una de las más imponentes y curiosas del museo. Sobre una de las paredes se ve una foto sepiada en la cual Emilio Civit comparte una larga mesa junto a otros camaradas y en el centro aparece la figura de Julio Argentino Roca, en épocas de la campaña al desierto.
La sala se completa con algunos de los muebles que utilizaron a lo largo de sus vidas (escritorios, un barco a escala, un aparador e incluso un extraño armario con decenas de pequeños cajoncitos y puertas traído desde Francia y que resultó uno de los más queridos por la familia) pero sin lugar a dudas, el que más impresiona es un sillón de pana terracota en el cual murió Emilio Civit, en el mismo sitio donde se encuentra exhibido hoy.
La última sala (la Sanmartiniana) es la que más tiempo les recomiendo que le dediquen y traten de llegar a ella acompañados de algunos de los guías que muy amablemente se ofrecen a explicarles cuando hacen el ingreso. En ella se encuentra un gigantesco mural pintado al óleo del Gral. en sus años de juventud, precisamente de la época del cruce de los Andes. Debajo de él, un viejo y roído sillón de terciopelo rojo atestigua el lugar en el que el prócer llevaba a cabo el placer por la lectura y donde dicen, escribió algunas de la frondosa correspondencia que mantenía con sus amistades, casi todos del ámbito de la política.
Frente a él se encuentran otros óleos, pero el que más llama la atención es uno con un retrato de Manuel Belgrano, en la misma pose y composición clásica, esa que abunda en los emblemas nacionaes, los billetes y en la mayoría de los libros de historia.Entre otros objetos se encuentra uno de los famosos sables que llevaba colgado de la cintura y también el manuscrito de las crónicas de viaje del cruce de los andes, reversionado por una sobrina de quien tuvo a cargo la tarea original de escribirlo, ya que según dicen, el estado lamentable en el que quedó el libro luego de la gesta hizo necesario reescribirlo.
En este álbum interactivo les dejo las imágenes de lo que pueden ver si se deciden a visitarlo. Si andan por Mendoza no lo duden, tómense una mañana y regálense un viaje por nuestra historia y a la vuelta me cuentan.
MUSEO DEL PA SADO CUYANO "DR. EDMUNDO CORREAS"
Abierto de Febrero a Diciembre.
Horario: de lunes a viernes de 9 a 12.30 hs.
Dirección: Montevideo 544 (Ciudad de Mendoza)
Para visitas o grupos escolares solicitar turno al 0261-4236031
email: [email protected]