Estoy sentado frente a mi ordenador escuchando una lista de Spotify, suena una canción de el gran Tom Petty con sonido suave y meloso es Square One, la cual pertenece a su álbum Highway Companion lanzado en el año 2006. Levanto la vista y miro hacia la ventana, el cielo se va tiñendo de rojo, las sombras van ganando terreno a la luz, miro el reloj y me doy cuenta de que cada vez los días son más largos, esto indica que este absurdo y cálido invierno se va consumiendo poco a poco para dar paso a la ansiada primavera.
Continua avanzado mi lista musical ahora suena todo un clásico del jazz, All for me, en este caso en la extraordinaria versión de Billie Holiday con el sentimiento que sólo ella sabía dar a sus interpretaciones. Este tema me transporta en el recuerdo a aquellas películas americanas en blanco y negro de los años 50 en la que una chica cantaba en un local cargado de humo donde los clientes disfrutaban de la actuación con un vaso de whisky en una mano y un cigarrillo en la otra, cuando el hábito de fumar era un gesto social bien visto.
La oscuridad gana terreno a la tarde, las luces de la calle ya se han encendido aunque todavía se adivina el azul del cielo, la noche está cayendo. Ahora suena el incombustible Bob Dylan, con su forever yourng. En esta canción un padre da consejos a su hijo, como lo podemos hacer muchos de nosotros y lo hicieron nuestros padres, pero la rebeldía de la juventud no nos dejaba escuchar aunque esos consejos se harán eco en nuestra mente cuando llegamos a la madurez.
Me he puesto melancólico, tengo que marcharme pero voy a romper el orden de mi lista de Spotify para dar un poco de alegria a mis oídos y mi mente después de este tema que me ha dejado un poco bajo de moral al recordarme que cada día queda más atrás y sin retorno la lejana juventud
Me apetece escuchar algo sencillo, easy, es una canción de The Commodores y especialmente la versión que lanzó en Lionel Richie en su disco Tuskegee en el 2012 junto al gran Willie Nelson. Facil como una mañana de Domingo…
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