El país de la bota, o sease, la bella Italia, tiene algo mucho más llamativo que su rica pasta y el idioma: su música, desde la ópera con Pavarotti hasta el pop más juvenil con artistas como Laura Pausini o Eros Ramazotti. Una canción en italiano, inclusive si se parla un pó, llega a ser no solo preciosa, sino conmovedora y muy dulce, quizá porque el idioma italiano suena así, dulce y armonioso. Y esto no solo pasa con las baladas románticas, con el pop-rock más fresco también. Y ese es el caso de esta canción: Gli ostacoli del cuore (Los obstáculos del corazón), canbtada por Elisa Toffoli y el rockero Luciano Ligabue. La unión de ambos es potente: la voz de ella es dulce y tiene alma; la de él, áspera y ronca, como todo rockero debe tener. Elisa suele colaborar con otros artistas italianos y cuando lo hace el éxito está asegurado. No es de extrañar que ella y Ligabue sean ídolos en su país y que esta canción también. Es escucharla y enamorarse de su melodía y su mensaje.