Un nuevo año comienza, y con él, los propósitos y buenas intenciones. Y es que en cada inicio de año nos proponemos bajar de peso, hacer más ejercicio, cambiar nuestros hábitos de alimentación o, simplemente, mejorar nuestro estilo de vida. Sin embargo, muchos nos quedamos a la mitad del camino hacia nuestro objetivo.
La infinita gama de dietas, rutinas, y sobre todo, el apretado ritmo de vida, lo hacen parecer lejano, costoso y complicado. Por eso, San Rafael se dio a la tarea de proponer una forma fácil y efectiva para lograrlo: Vida en Balance, un programa paso a paso y sin grandes sacrificios, que hace nuestro recorrido placentero y nos lleva a disfrutar aun más la vida. El programa fue creado en conjunto por seis expertos en nutrición, gastronomía, entrenamiento físico, medicina del deporte, psicología y yoga, con la participación y testimonio de Celina del Villar.
Todos ellos nos dan sus mejores tips para iniciar el año:1) Enfócate en sentirte bien más que en verte bien. Si quieres llevar una vida más saludable debes tener siempre presente que el cambio no se genera de afuera hacia adentro sino al revés. Si sientes la necesidad genuina de hacer algo por ti, decídete y éntrale con todo. Desde hacer limpieza de closet y alacenas hasta escoger el deporte en el que más cómodo y feliz te sientas. El secreto es que no se convierta en una carga y que los pequeños grandes cambios sean premios, no castigos. Aunque al principio puede costarte trabajo, poco a poco se empezará a transformar en una dulce disciplina con la que te engancharás. Entonces se empezará a generar el verdadero triunfo. Recuerda que no se trata sólo de llegar al peso ideal, este cambio va más allá. El cambio del que te hablo es holístico y la finalidad es que dure para siempre.
Celina del Villar – Conductora, maratonista y madre de familia
2) Cuida lo que comes pero también cuánto comes. En temas de alimentación, no existe un alimento bueno o malo per se. La mejor recomendación nutricional podría resumirse enteramente a esta simple frase: “La dosis hace al veneno”. Podemos convertir algo bueno en malo si lo consumimos en una cantidad inadecuada y algo malo en bueno si lo consumimos en la cantidad adecuada. La gente tiende a satanizar ciertos alimentos y a enaltecer demasiado otros, de tal manera que cuando “rompes” la regla no sabes medir la porción de lo prohibido. Imagina que tu estómago es del tamaño de una bolsita de plástico de cierre hermético como las que usas para el sandwich de tus hijos. Trata de comer lo que crees que cabría en esa bolsita dejando una cuarta parte vacía para que se pueda mover la comida al mezclarse. Además, intenta incluir frutas y verduras en las tres comidas. Esto le da volumen a la dieta, te hace sentir más satisfecho y enriquece tu vida con vitaminas, minerales, antioxidantes, fibra y agua. Disminuye el consumo de grasas y azúcares, sobre todo en bebidas, recuerda que en promedio necesitamos 2 litros de líquido al día, que en su mayoría debe estar conformado por agua sola.
Maricarmen Osés – Nutrióloga
3) Emplea ingredientes más saludables al cocinar. La recomendación es usar sal de mar martajada en la elaboración de tus platillos. Contiene mucho menos sodio aparte de que aporta oligoelementos que nutren todo tu sistema. El aceite de aguacate también es una buena opción a la hora de cocinar, ya que resiste un poco más en el fuego que el aceite de oliva, no se quema al cocinarlo y tampoco libera ácidos grasos dañinos para la salud. Para no usar tanta sal en las ensaladas: recomendamos que le agregues el jugo de limón y dejarla reposar al menos unos 2 minutos. De esta forma lograremos que el jugo de limón curta los elementos realzando sus sabores para obtener un aderezo natural libre de grasas… ¡Pero sobre todo naturalmente saludable!
Mariano Garcés – Chef Yogi
4) Empieza a moverte un poquito más. Comienza por activarte físicamente con movimientos o ejercicios básicos y fáciles de realizar, como caminata, carrera, bicicleta, saltar cuerda o subir y bajar escaleras. Luego integra algunos ejercicios de fuerza como sentadillas, abdominales y lagartijas. Experimenta también estirando el cuerpo, recordando lo rico que es sentirlo y quitarle la tensión de encima. Tu estilo de vida no es un obstáculo; no importa si eres trabajador, ama de casa o estudiante. Tampoco dónde te encuentres, ya que el tiempo requerido es muy flexible y aplica para todas las personas. Así que de ahora en adelante no puedes decir: “No tengo tiempo para hacer ejercicio”. Recuerda que tu salud es lo más importante y que con pequeños hábitos adquiridos comenzarás a sembrar un cambio de raíz. Lo mejor es que no hay ninguna prisa, porque queremos que lo hagas tranquilamente y con muchas sonrisas. Recuerda tenerte paciencia y disfrutar todo, lo logrado y lo no logrado. Al final, es lo que te llevará al éxito.
Raúl Victoria – Entrenador Físico
5) Conoce tus capacidades y establece objetivos. Para comenzar cualquier entrenamiento, es importante conocer tu estado de salud. Debes asegurarte de que eres apto para realizar ejercicio y tienes las condiciones para practicar cualquier modalidad de actividad física. El hecho de acudir al especialista médico deportivo, además de descartar factores de riesgo, te puede ayudar a establecer un objetivo claro y alcanzable, desde practicar deporte por salud hasta inscribirte en alguna competencia o torneo. Cuando tienes claros tus objetivos, sabes hacia dónde te diriges y puedes confirmar si vas en el camino correcto. El sentirte bien es el primer paso, pero conforme avances te encontrarás con agradables sorpresas acerca de tu potencial. Pruebas sugeridas: historia clínica, estudios de laboratorio, electrocardiograma de reposo y prueba de esfuerzo.
Dr. Julián Pérez – Médico del Deporte
6) Aprende a hacer y cumplir tus propósitos. Un nuevo ciclo está lleno de oportunidades y el año que empieza es precisamente eso; una puerta que se abre a una nueva vida. Toma la paciencia y la humildad como tu sostén para abrirte a lo desconocido con la expectativa de descubrir algo glorioso. Y créetelo, porque está por suceder. Haz una lista de los propósitos que quieres alcanzar en los próximos doce meses. Primero en relación a tu cuerpo y alimentación; después a tu auto-realización. También con respecto a tu pareja, familia e hijos. Y finalmente, en tu trabajo. Después, indica tu propósito principal para la próxima semana. Y haz una lista para los retos semanales siguientes. Deben ser:
- Específicos. Lo que pidas, te será concedido. Piensa bien lo que quieres y detalla tus peticiones.
- Medibles. Definidos en un marco de tiempo. Pon fechas y ve actuando sólo por hoy.
- Alcanzables. Que sean realistas; no te dejes llevar por la fantasía.
- Que resuenen en tu corazón. Tú sabes perfectamente lo que deseas.
- No contradictorios. Que exista congruencia entre todos ellos.
Gisela Hengl – Psicoterapeuta
7) Encuentra el balance. El yoga ayuda a las personas, tanto física como mental, emocional y espiritualmente. En el área física te acerca a tu propio balance interviniendo en todos los sistemas del cuerpo: respiratorio, cardiovascular, digestivo, endócrino, nervioso, etc. Con posturas o asanas y técnicas de respiración o pranayama alimentas, estimulas y consientes al cuerpo de forma terapéutica para liberarte de síntomas y lograr una mejor calidad de vida. Con la práctica, sin duda, te sentirás mucho mejor, más saludable y con mayor energía y vitalidad.
Marisol González – Yogamaster
El 2013 comienza y estás listo para emprender la aventura de convertirte en una persona sana. Algo empezará a cambiar en ti. Pondrás atención en lo que entra a tu boca, en tu hidratación, cuerpo, pensamientos y comenzarás actividades suaves para mover el cuerpo un poquito más de lo común.
Aprovecha esta nueva oportunidad. Si estás verdaderamente decidido a lograrlo, sigue estos consejos y muchos más en www.vidaenbalance.com