Revista América Latina

La kermés

Por Mexinol
Todos nos hemos pegado una escapadilla de fin de semana a algún pueblo cercano para asistir a las fiestas en conmemoración de san perico de los palotes. El santo es lo de menos, lo de mas es el pueblo (pa saber llegar) y asistir a los festejos.
En México no es muy común el celebrar las fiestas del pueblo, e incluso en las ciudades grandes no es habitual que tengan sus fiestas en honor al patrono de la ciudad, para empezar porque ni siquiera tienen patrono. En algunos casos celebran el aniversario de fundación de la ciudad, donde organizan festejos en el centro o ponen unas barracas en algún punto de esta a modo de conmemoración histérica.
Lo anterior es debido a que, a mediados del siglo equis palito uve (vamos, el 19), en México se pelearon los políticos con los curas, y aunque los políticos siguen creyendo en dios y yendo a la iglesia cada domingo, el país se convirtió oficialmente en laico, es decir, no hay una religión oficial, y cualquier religión es admitida y respetada, aunque la mayoría sean católicos.
De todos modos las iglesias no dejaron de existir, ya que los curas no quisieron desmantelar el negocio que tienen montao (que ¡menudo negocio!, que empezaron con un pesebre y mira la multinacional que tienen ahora). La cosa es que para no dejar de celebrar sus ritos católicos y acumular fanáticos, ellas se enfocaron en festejar al santo de turno, en honor del cual está erigida la iglesia en cuestión. También nombraron a un santo patrono a nivel nacional (en este caso es la "virgensita" de Guadalupe) para en su honor armar también algún aquelarre. Pero en vez de aquelarre, a estas celebraciones eclesiásticas se les ha denominado kermés (kermeses en plural).
Como bien podréis suponer, la finalidad de estos eventos es mas bien recaudatorio, y es que aquí no se les da ninguna subvención gubernamental que salga de los impuestos, así que tienen que hacerse dinero de alguna manera. A veces aprovechan al santo de turno para hacer el evento, o a veces organizan algo en semana santa o navidades. El objetivo es hacerse de dinero para arreglar el techo de la iglesia, comprar una imagen de algún cristo nuevo, o para la capa del cura (aunque a mas de uno se apuntaría para caparlo gratis).
La Kermés suele organizarse en terrenos que están alrededor de las iglesias, a veces son propiedad de la propia iglesia, a veces es una placita que pertenece al municipio pero pegada a la iglesia. En ella suelen poner algunos tiovivos, que mas pertenecen a un museo de antigüedades que a una kermés. Las señoras que asisten a la iglesia suelen poner puestos de venta de comidas típicas regionales, pasteles, o cosas por el estilo; todo hecho por ellas mismas, poniendo de su bolsillo los ingredientes, y muchas veces cediendo todo lo cobrado a la iglesia (bueno, supongo que algúna moneda se perderá en el camino. Aquellas iglesias mas potentadas, hasta organizan la rifa de un coche o un viaje.
La kermés habituálmente suele durar una semana, poniendo especial énfasis en los eventos del fin de semana. Lo típico es que los vecinos vayan, se gasten un dinerillo, que cenen ahí mismo, y jueguen a la lotería.
Lo que sí es que debido a que el evento está organizado por la iglesia, está prohibida la venta de bebidas vigorizantes etílicas, al igual que el alquiler de mujeres de la vida galante, ya que estas kermeses, son consideradas "eventos familiares".
En fin, que si un fin de semana no hay mucho que hacer o no quieres gastar mucho dinero, puedes darte una vuelta por los alrededores de la iglesia, a ver si hay kermés, cenas barato, paseas un poco, y expías tu alma por algún pecadillo a cambio de donar un dinero a la iglesia.

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