No vamos a hablar de que haya un rey con grandes atributos o de baja estatura, sino que vamos a hablar del sistema de transporte conocido como metro, que en el caso de Monterrey, recibe el nombre de "Metrorrey".
Por cierto, no se porque coñe se llama metro si es mucho mas largo. La etimología de la palabra tiene que ser medio curiosa, tampoco se puede traducir del gringolés "subgüey" o "subcamino", porque en el caso de Monterrey en casi todos sus recorridos viaja por encima de las cabezas de las personas en lugar de ir bajo tierra cual gusano rastrero.
Efectivamente, contra todo pronóstico o contra toda expectativa, en Monterrey contamos con metro, tampoco es que sea el mejor del mundo y que comunique toda la ciudad, pero está bastante bien. Actualmente cuenta solamente con dos líneas, la uno y la dos, aunque hay expectativas de agregarle mas líneas, en principio se tiene proyectadas la tres y la cuatro, pero no se tiene ni idea de cuando se pueda hacer, yo espero que en cien años ya estén funcionando.
La línea uno fue la primera en construirse (lógicamente) y recorre la ciudad desde el este al oeste y viceversa. Por cuestiones económicas, parece que salía mas barato el hacerlo elevado, así que pillaron una calle con suficiente anchura y le plantaron unas horrorosas columnas grises, encasquetándole después encima la propia estructura del metro. Le hicieron también las estaciones en la parte alta, de un color gris en su parte exterior. La estructura vista desde la calle es bastante fea, y en los puntos donde hay columnas bajó mucho el valor comercial de los locales y casas. Es por ello que la línea 2 se decidió hacerla subterránea, conectando el sur de la ciudad con el norte pasando por el centro.
Como el presupuesto era ajustado se empezó la línea dos por tramos, el primer tramo viaja desde el propio centro de la ciudad hacia el norte, hasta entroncar con la línea uno e ir un par de estaciones mas allá de manera subterránea. Hace unos pocos años se decidió extenderla mas hacia el norte de la ciudad para dar servicio a mas gente, particularmente los municipios del norte del área metropolitana, donde vivimos la mayoría de los pobres. Así que se agregó el segundo tramo a la línea dos del metro.
Como en caso de continuarlo subterráneo la marmaja se hubiera acabado con los primeros soborn… digooo los primeros ladrillos, se decidió hacerlo nuevamente elevado. Nada mas que en esta ocasión se preocuparon mucho por la estética, ya que los vecinos por donde iba a pasar el metro no querían tener los problemas de la línea uno (depreciación de sus casas y negocios) y exigían que fuera subterráneo, montando varias manifestaciones para evitar la construcción del metro. Al final el gobierno puso su autoridad encima la mesa e hicieron el “metro elevado”, pero cuidando mucho la estética, y la verdad es que les quedó mucho mejor en el aspecto estético.
Algo que cabe destacar es los vagones del ferrocarril, que son de las mas alta tecnología del mundo mundial, con la mejor calidad también del mundo, y los mas bonicos de todo el mundo; y como va a ser de otra manera si están hechos en el país vasco, tierra de grandes ilustres como el mexiñol... ¡Ejem!, después de este pequeño lapsus de ombliguismo (eso de trabajar en pelotillas ombligueras termina afectando), comentar que los vagones están muy bien. Tienen aire acondicionado y un sistema de megafonía muy chulo que te va diciendo el nombre de la siguiente estación y por que lado del vagón te tienes que bajar, unos asientos muy cómodos y unos tubos para sujetarse muy anatómicos (ya ves que hoy en día todo es anatómico y ergonómico).
El precio del billete es bastante barato, apenas 4 pesos por persona (unos 0,25€), la mitad de lo que vale el autobús. Los billetes en sí tienes que comprarlos en unas maquinillas que encuentras en cada estación, como esas en las que venden los cigarros. Puedes comprar de uno a 20 pasajes, mismos que serán grabados en una tarjetica como las de crédito. Esta tarjetica posteriormente la metes en la ranura de la típica trampa esa con palos para poder pasar, mientras te sigan quedando viajes la tarjetica saldrá por el otro lado, una vez que consumes el último viaje, la tarjetica se queda en la trampilla para ser recargada por otro viajero y evitar contaminación con plásticos o papeles.
Algo que cabe destacar del metro de Monterrey es que este funciona con electricidad (toma, como casi todos los del mundo). Pero el detalle que lo hace especial es que esta electricidad viene de fuentes renovables, para mas detalles, desde el vertedero municipal. Y es que después de recoger la basura, esta se confina y, como todos sabemos, la basura genera gases (pal que no lo sepa que acerque la nariz al bote la basura de su casa después de quince días y sabrá a que me refiero), estos gases por lo visto son aprovechados para "nosecomo" convertirlos en electricidad. Por lo tanto, el 100% de la electricidad usada por el metro es de esta planta de basura, y la energía que sobra (porque sobra) se usa para el alumbrado público.
El sistema es muy modesno y eficiente, pero se necesita que llegue mas lejos de donde lo hace actualmente. Pero como para ello es necesaria una inversión un poco fuerte y el rincón mexiñol todavía no da suficiente como para prestarles y que la hagan. Una alternativa temporal de esas que duran 100 años que se encontró es la crear el metrobús. El metrobús consiste en una serie de autobuses con paradas prefijadas que llegan hasta la primera (o última) estación del metro, y que dentro del costo del mismo pasaje (los 4 pesos que comentaba) te da acceso a subirte tanto a estos autobuses como al propio metro. Estos autobuses son fácilmente identificables pues llevan los mismos colores que el metro, e igualmente cuentan con aire acondicionado, aunque no con megafonía anunciativa de la próxima estación.