Cuando sales de casa para explorar el mundo (y por mundo me refiero a extranjia, no al pueblo del abuelo), entras en contacto con mucha gente de diferentes costumbres, y aprendes cosas nuevas de esas personas. Pero en particular en lo tratante a extranjia, esas personas extranjeras en gachupilandia quieren aprender de tus costumbres, pero sobre todo de tu lugar de origen.
La mayoría de preguntas irán enfocadas en ver que es lo que mas echas de menos de aquel lugar que dejaste atrás, o ver que hay de diferente entre tu ciudad de nacimiento y el nuevo paraíso donde estás viviendo. Muy seguramente te pregunten que donde se está mejor, si aquí donde estás o aquello que dejaste atrás, y claro, como medida de cortesía uno debe decir que los dos lugares tienen sus cosas buenas y sus cosas malas, porque por un lado no se trata de decir que la cuna donde naciste es una mierda donde encontrar un currelo decente es mas complicado que ganar el euromillon, o que los políticos solo piensan en sobres llenos de billetes. Pero por otro tampoco se trata de decir que en el nuevo país encontrar jale es mas difícil que ganar el melate, o que los políticos solo piensan en tener casas y terrenos por medio mundo.
En fin, que la mayoría de gachupines dicen que si lo que mas extrañan son los amigos, que si la familia o la comida.
Y aquí viene el meollo del asunto, ya que al tocar el punto de la comida, en México como acto reflejo te preguntarán que cual es el platillo típico de tu tierra. Así que si eres valenciano mas vale que tengas a la mano una buena receta de la paella, si eres madrileño tráete bajo el brazo los mejores secretos del cocido de tu abuela, y si eres de burgos tendrás que mostrarles como hacertela morcillona...
La cosa es que en México tampoco se queda atrás en el aspecto culinario y casi todas las ciudades tienen un platillo típico, uno que debes probar al visitar la ciudad o muchos no te creerán que la has visitado, vamos, algo así como ir a Barcelona y no darse un garbeo por las ramblas.
En el caso de Monterrey, ciudad de residencia del mexiñol, el plato típico es el "cabrito a la griega". Yo cuando lo oí mencionar por primera vez pensé en alguna receta secreta donde el cabrito se prepararía de manera espacial y que involucraría aceite de oliva y especias mediterraneas, pero no chaval, nada mas lejos de la realidad igual que yo andas tirando por el camino equivocao.
Tranquilo, que no te voy a decir que el cabrito a la griega no lleva cabrito, efectivamente lo lleva, y consiste en la cría de la cabra y el cabro... estooo, del macho cabra. Lo que hay que hacer es matar un cabrito lechal, algo así como el cordero, de los que todavía no comen hierva para que no cambie el sabor de la carne además de que la carne del bicho sea mas tierna.
Una vez muerto el bicho, se abre en canal, se le sacan lo riñones, la sangre, y el resto de higadillos que se cocinan aparte, con lo cual se hace lo que llaman fritada. La fritada es una especie de caldillo que lleva toda el triperío y que viene a ser como el primer plato del cabrito. Es recomendable echarle a este caldillo un poco de salsa picante para darle un sabor mas mexicano, pero si no quieres puedes saborearlo igualmente, la verdad es que está bien sabroso, eso sí, siempre acompañado de las inevitables tortillas.
Otra de las partes del cabrito que se prepara y es recomendable pedir son los machitos, que al oírlo inicialmente pensé que hablaban de lo mismo que estás pensando tú, pero no, los machitos vienen a ser las tripas del cabrito junto con los intestinos y algunas otras piezas de la zona estomacal del bicho, algo así como los callos a la madrileña pero en versión cabrito, y en una receta totalmente diferente.
Y para los malpensaos que creían que los machitos eran los buebos del cabrito, os diré que en realidad sí se come esa parte del cabrito, pero no se llaman machitos sino criadillas, que esos sí tengo que reconocer que no he probado.
Ya que al bicho le quitaron el triperío para la fritada, las tripas para los machitos, los buebos para las criadillas y cual monarca francés pasó por el cadalso para quitarle la cabeza que también es cocinada aparte, el plato fuerte es el resto del cabrito.
La preparación del cabrito es sencilla... pal que sabe, primero tienen que marinarlo, es decir, embadurnarlo con especias, sal, y otros mejunjes que no voy a explicar aquí por no ser este un blog de cocina sino uno de cultura y costumbres (a que he quedao de puta madre en lugar de decir que no tengo ni puta idea).
Ya que el cabrito está bien marinado y así abierto en canal, se pone en unas varillas como si lo fueran a fusilar, con los brazos extendidos pidiendo clemencia a su ejecutor (aunque después de abrirlo en canal y cortarle la cabeza... poca clemencia queda ya). De esa manera expuesto se pone tieso al sobre unas brasas de carbón por un lapso de unas tres horas, para después ponerlo cabeza abajo por otras tres horas.
Según un experto en la materia, al estar cocinandose en esa forma y con un poco de imaginación , se puede ver la forma de una Y griega, y es por ello que se llama cabrito a la griega. Alguna vez que lo he comentado con alguien les he dicho que desde mi punto de vista mas parece una equis, así que debería llamarse cabrito a la x, pero si nos peleamos entre y griegas y equis, esto va a parecer un problema de álgebra, y como no soy muy bueno con las matemáticas, mejor no lo discutimos mas o terminaremos lanzándonos las calculadoras a la cabeza.
Por satisfacer vuestra curiosidad y en aras de enriquecer vuestro conocimiento, os diré que en varias ocasiones me he sacrificado probando el cabrito, y aunque mi paladar no es nada fino tengo que deciros que está cojonudo Los que saben de estas cosas dicen que la mejor parte es la paleta, que viene a ser el omóplato del bicho, o para los que como yo no aprobaron la clase de ciencias naturales donde explicaban las partes del cuerpo humano, el omóplato es la parte del hombro.
La realidad es que en Monterrey no es que to quisqui ande comiendo cabrito todos los días, en realidad la gente prefiere una buena carne asada o una discada que un cabrito (pa empezar porque el precio del cabrito es mucho mas alto), pero es inevitable que en una visita a esta ciudad te zampes una buena razón de cabrito con su fritada y sus machitos, y para el que tenga curiosidad, que pruebe las criadillas y me cuente que tal saben.