Dirán ustedes, queridos y escasos lectores, que últimamente me persigue el lado oscuro de las entradas y proliferan más modelos femeninas que en anteriores ocasiones. Hoy le tocó el turno a Natalia Vodianova, una joven rusa que, además de ser así de atractiva, creo que es extremadamente generosa en su acción social. Enhorabuena. Disfrutar de las instantáneas de esta modelo resulta bastante más apetecible que profundizar en las cloacas del partido Popular, también en las del socialista o recrearse uno con las contradicciones de la extrema izquierda, emergente o no, y que constituyen, según alguno de sus líderes, algo sobre lo que cabalgar. Las facciones de esta muchacha soviética invitan más a la paz y a la concordia. Que así sea.