Venía una frase, acompañando el vídeo que dice: “Así entiende el amor una persona con Trastorno Obsesivo Compulsivo”. Lo cierto es que el testimonio es impactante, y a cierto nivel resulta muy clarificador de lo que vive el “obsesivo” en su día a día más allá de la gravedad de la situación particular que esté viviendo. A mayor angustia, mayor necesidad de aferrarse a un “otro” (en este caso mujer) que le saque del pozo. A mayor salud (disculpen el atrevimiento de usar este término), mayor autoapoyo, menos angustia, más independencia… y tal vez algún rato de paz… Aquí lo tenéis: