Némesis
Autor: Philip Roth
Editorial: Literatura Random House
ISBN: 9788439723332
Páginas: 224
Sinopsis
En el «calor sofocante de la Newark ecuatorial» una espantosa epidemia causa estragos y amenaza con dejar a los niños de la ciudad de Nueva Jersey mutilados, paralizados o minusválidos, e incluso con matarlos. Este es el sorprendente tema de la nueva y desgarradora obra de Roth: una epidemia de polio que tiene lugar en un t iempo de guerra, el verano de 1944, y sus efectos sobre la comunidad de Newark, regida por la cohesión y los valores de la familia, y sobre sus niños.
El protagonista de Némesis es Bucky Cantor, un joven de veintitrés años responsable de las actividades al aire libre de los alumnos de una escuela, lanzador de jabalina y levantador de pesas, que vive volcado en sus pupilos y frustrado por no haber podido ir a la guerra con sus coetáneos a causa de un defecto de visión. Cuando la polio empieza a asolar el patio de recreo, Roth se concentra en los dilemas de Cantor y en las realidades cotidianas a las que este se enfrenta, y nos conduce a través de todas las emociones que una plaga semejante puede engendrar: el miedo, el pánico, la cólera, el desconcierto, el sufrimiento y el dolor.
Alternando el escenario de las sofocantes y malolientes calles de la Newark asediada y el de Indian Hill, un inmaculado campamento infantil sito en lo alto de las montañas Pocono, donde «el aire estaba exento de toda polución», Roth retrata a un hombre bueno, enérgico y armado con las mejores intenciones que libra su particular guerra contra la epidemia.
Reseña de Mustis
Nunca había leído a Philip Roth, lo confieso. Sí, sé que nuestro blog es el organizador de la iniciativa, pero mi hermana Rustis es la fan del escritor y yo la que la sigo en sus ocurrencias allá a donde me lleve. Y no las tenía todas conmigo acerca de dónde me llevaría. Por eso, al escoger libro para mi reseña, busqué uno que no fuera muy largo y cuyo argumento me llamase en cierta medida la atención. De esta forma llegó Némesis a mis manos.
Pensándolo ahora, tras todo lo ocurrido con el ébola en nuestro país, mi lectura no ha podido estar más de actualidad. Porque, a pesar de que Roth sitúa la historia en el Newark de 1944, hay rasgos enormemente comunes entre el temor que inspiraba el virus de la polio, tan desconocido aún entonces, y el que nos inspira el ébola actualmente.
Lo que más me llamó la atención de la escritura de Roth es que me esperaba que fuera más densa, más complicada de entender. Tal vez con otros libros suyos sea así, no puedo saberlo, pero me gustó la sencillez de Némesis a la hora de contarnos la historia. Esto no quiere decir que me haya resultado un libro fácil de leer, puesto que a medida que iba viendo cómo tantos niños morían o quedaban lisiados a causa de la poliomielitis un sentimiento de frustración y pesimismo me invadía. Y es que un virus que lleva totalmente erradicado de Europa desde el año 2002 y al que ya no tememos, en aquel último año de la II Guerra Mundial era uno de los mayores miedos para las familias.
El personaje principal, Bucky Cantor, está perfectamente dibujado como un chico vencedor (sano, atlético, buena persona) que se convierte en vencido a medida que pasa el verano. Frustraco por no haber podido alistarse como soldado debido a su miopía, afronta las vacaciones como trabajando en la escuela de verano del barrio judío de Newark. Allí los niños pasarán sus ratos de ocio y él cuidará de que hagan ejercicio. Pero pronto la polio empieza a propagarse entre ellos, haciendo estragos y llevándose incluso a su favorito, y entonces Bucky, con un gran sentimiento de responsabilidad inculcado por su abuelo, empieza a desmoronarse y a echarse la culpa a sí mismo y al dios que permite que algo tan cruel suceda.
Es especialmente duro leer cómo, al no saberse prácticamente nada sobre el virus, la gente empezaba a atribuir los contagios a distintas causas sin tener pruebas científicas de que el virus se propagase así: si los niños corrían demasiado, si estaban en lugares sucios, si se acaloraban mucho,... Cualquier situación podía ser la causante, y Bucky el responsable por permitirlo. Los únicos momentos en los que Bucky puede sentirse mejor son los que pasa junto a su novia en el campamento de verano de Indian Hill en el que por fin decide trabajar, pero ni aún estos, ya que no puede evitar la gran preocupación y culpa de haber abandonado a los muchachos de su escuela de verano para buscar la tranquilidad de un lugar al que el virus no ha llegado aún.
Philip Roth
Es pues ésta una novela triste, pesimista y que me ha hecho pensar mucho después de haberla acabado. He recordado que cuando era pequeña veía algunas veces a personas mayores caminando con hierros en las piernas o con muletas muy dificultosamente, y que mi madre me contaba que en su infancia habían pasado una enfermedad llamada polio. Eso era lo poco que sabía entonces, y Philip Roth, muchos años después, me ha hecho comprender la verdadera magnitud de la enfermedad en aquellos años, y agradecer que poco después se crease la vacuna que la erradicaría de gran parte de nuestro planeta. Me provoca un gran dolor pensar que para los niños de la novela y para muchísimos niños reales esa vacuna no llegó a tiempo. Definitivamente, Némesis es una historia para recordar.